Ambos proyectos fueron impulsados por el oficialismo para mitigar el impacto económico derivado de la pandemia de coronavirus.
La Cámara de Diputados aprobó hoy y envió al Senado para su sanción definitiva un proyecto de ley que suspende los procesos de concursos preventivos y quiebras hasta el 31 de marzo de 2021 y otro que amplía la moratoria para deudas impositivas y previsionales.
Ambos fueron impulsados por el oficialismo para mitigar el impacto económico derivado de la pandemia de coronavirus.
El primer proyecto debatido y aprobado fue el vinculado con los concursos y quiebras, al que siguió el de ampliación de la moratoria, votado pasadas las 23.
Esa última iniciativa fue aprobada con el voto de 137 diputados aportados por las bancadas del Frente de Todos, el Interbloque Federal para Unidad para el Desarrollo, Interbloque Federal y el Movimiento Popular Neuquino, mientras los diputados de Juntos por el Cambio se abstuvieron.
El proyecto de ley de ampliación de la moratoria permitirá a los autómomos, monotributistas y empresas acceder a un plan de pagos para deudas impositivas y previsionales acumuladas hasta el 31 de julio.
La norma que pasa a revisión del Senado establece que se podrán acceder a planes entre 48 y 120 cuotas para regularizar las deudas acumuladas hasta esa fecha y prevé premios para los contribuyentes cumplidores.
Más temprano, tras una serie de breves exposiciones que se iniciaron luego de que se aprobara el tratamiento sobre tablas, 250 diputados pertenecientes a todos los bloques de la Cámara dieron sus votos a favor del texto sobre quiebras consensuado por la mañana en la comisión de Justicia, a excepción de los dos diputados de la Izquierda que se abstuvieron.
El proyecto aprobado por Diputados y girado al Senado propone la suspensión hasta el 31 de marzo de 2021 del cómputo de plazos procesales en todos los procesos regidos por la Ley de Concursos y Quiebras.
En tanto, en el caso de los nuevos juicios iniciados a partir de la vigencia de la ley, el plazo será de 180 días pudiendo el juez, a pedido del deudor, en las condiciones establecidas por dicha norma, extenderlo por única vez en sesenta días adicionales.
Además, el texto dice que «quedarán suspendidos en pleno derecho y sin requerimiento de parte los procesos de ejecución de cualquier tipo de garantías de obligaciones financieras; la totalidad de las subastas judiciales y extrajudiciales, incluidas las hipotecarias y prendarias; la prescripción y caducidad de los créditos».
Se prohíben también «nuevos embargos sobre cuentas bancarias, excepto para el caso de los procedimientos de comprobación y pronto pago de créditos laborales, y créditos de origen alimentarios».
Durante el debate, el presidente de la comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, Rodolfo Tailhade (Frente de Todos) destacó hoy el consenso logrado entre las fuerzas políticas para avanzar en el análisis de la Ley de Quiebras y señaló que con esta herramienta «las empresas puedan tener un consuelo en una crisis tan profunda».
El diputado oficialista hizo «un reconocimiento al trabajo que realizaron los bloques opositores, como Juntos por el Cambio así como los diputados Graciela Camaño y José Luis Ramón».
Su compañero de bloque y autor de uno de los proyecto, Carlos Selva, dijo que «se debe dar previsibilidad a las empresas para que tengan el plazo de cobertura ,y por eso si bien se había propuesto hasta diciembre, se decidió extenderlo hasta el 31 de marzo».
También destacó la importancia de que se hayan exceptuado de la ley «a los créditos laborales y alimentarios» y señaló que la norma es «concordante con la ley de moratoria que busca ayudar a poner en marcha el aparato productivo».
En el mismo sentido, el presidente del bloque PRO, Cristian Ritondo, agradeció «al oficialismo y otros bloques de la oposición que hayan aceptado tratar este tema como complemento de la ley de moratoria porque el aislamiento social ha generado una serie de desafíos que nos demanda a todos tener una rápida respuesta».
«Hoy el desafío que tiene la política es tender esa mano para muchos argentinos que hoy están en estado de desesperación. Para sostener esto tenemos que encontrar las coincidencias, y lo hemos hecho en el tratamiento de esta ley, lo que es una señal política muy concreta», completó.
La diputada de Consenso Federal Graciela Camaño aseguró que se está «aprobando la ley posible» para suspender las quiebras para que puedan «tener un alivio cien mil empresas que están complicadas y que contratan unos tres millones de trabajadores» de las cuales el 70% está en la zona metropolitana.
«Esta ley es importante porque la pandemia nos afecta a todos, pero en especial a un sector que le tenemos que decirle que lo vamos a dejar solo en esta patriada, que son los empresarios argentinos, a los que tenemos que sostener», afirmó la legisladora.
Por el interbloque Unidad para el Desarrollo, cuarta fuerza de la Cámara, Luis Di Giacomo (Juntos Somos Rio Negro), expresó: «tenemos que pivotar tanto sobre la norma de emergencia como ahora se está haciendo, como por modificaciones permanentes al régimen general en la materia y, fundamentalmente, por la incorporación permanente a la Ley de Concursos de un régimen especial para los pequeños deudores».