Tuvo una producción final de 4,9 millones de toneladas, un 16,7% más que el año anterior
La campaña del cultivo de soja 2019-2020 en el centro y norte de la provincia de Santa Fe estuvo «entre las mejores desde que se tiene registro», con una producción final de 4,9 millones de toneladas, lo que representó un aumento respecto del año anterior del 16,7%.
Así lo indica un informe de la Bolsa de Comercio de Santa Fe, elaborado en base a sus relevamientos semanales y a los datos sobre costos de producción aportados por cooperativas provinciales y de tarifas de referencia para el transporte de los granos, facilitados por una confederación con asiento en la provincia.
El precio de referencia utilizado fue el equivalente al promedio de cotizaciones diarias de pizarra del Mercado de Rosario de mayo y primera quincena de junio de este año, que era de 218,1 dólares por tonelada. El informe aclara que no se tomaron en cuenta los aspectos impositivos, sino el resultado en bruto para el productor antes de los impuestos
La superficie sembrada con soja en los doce departamentos del centro-norte de la provincia de Santa Fe fue de 1.436.000 hectáreas, según los datos suministrados por el Sistema de Estimaciones Agrícolas (SEA). Representó un aumento de 74.000 hectáreas (+5,4%) respecto del ciclo previo, y es el tercer registro más elevado desde que el SEA releva los 12 departamentos del centro-norte.
De este total, el 62,5% correspondió a soja de primera (897.500 hectáreas), mientras que las restantes 538.500 hectáreas fueron cultivos de siembra tardía. La superficie final cosechada fue de 1.420.430 hectáreas, con una pérdida de sólo el 1,1% sobre lo implantado.
La producción final en la campaña 2019/20 fue de 4,9 millones de toneladas, un registro inédito para la región, y con un aumento respecto de la campaña previa del 16,7%. «Ello se logró gracias a un rendimiento promedio, también récord, de 34,7 quintales por hectárea, el cual se ubica un 16,2% por encima del promedio histórico», agrega el trabajo.
En cuanto a la soja de primera, la producción final fue de 3,5 millones de toneladas, es decir casi medio millón más que el ciclo 2018-19, y el rendimiento promedio de la región fue de 39 quintales por hectárea.
Por otro lado, los cultivares de siembra tardía arrojaron un volumen de producto de 1.426.412 toneladas, un 23,7% por encima de la campaña previa, con un rendimiento promedio para la zona de 27,3 quintales por hectárea, muy por encima del promedio histórico.
Sin embargo, la campaña estuvo marcada por la variabilidad de realidades en los diferentes departamentos, destacándose los departamentos del sur del área de referencia, con rendimientos muy por encima del promedio global.
Por otro lado, los departamentos del centro y del norte del área evidenciaron rendimientos «muy por debajo del promedio global de la región», con algunos casos con más de 20 quintales de diferencia respecto de los departamentos del sur.