En la zona norte de la ciudad surgió otro comedor para colaborar con las familias más afectadas por la crisis económica que se agravó por la pandemia. Luis Peralta, uno de los organizadores, habló con CLG.
Por Matías Gregorio
La pandemia del coronavirus acrecentó las necesidades básicas de muchas familias rosarinas que ya venían golpeadas después de cuatro años muy duros. Ante la escasez de un plato de comida, cientos de vecinos de distintos puntos de la ciudad se organizaron para montar comedores u ollas populares. En la zona norte, puntualmente en Sorrento y Travesía, la gente del barrió lanzó una olla solidaria en colaboración con quienes dejaron de tener ingresos. La llamaron «Los pibes de Travesía». Luis Peralta, uno de los organizadores, habló con CLG.
«Comenzamos hace dos meses cuando surgieron los problemas en el barrio a raíz de la pandemia. Mucha gente no podía ir a trabajar, como los albañiles o personas que andan con un carro de caballo o un carro de mano. No tienen una salida laboral para tener su alimento todos los días», narró Luis.
Así decidieron organizar la olla solidaria para servir la cena todos los martes y viernes: «Cuando empezamos venían 50 personas, pero la gente se fue enterando y ahora vienen aproximadamente 100», contó el hombre. «Los pibes de Travesía» queda sobre avenida Sabín, a unos metros de Sorrento.
Al inicio la labor no fue fácil porque carecían de los elementos necesarios para cocinar. Pero la situación fue cambiando: «No teníamos mechero y nos donaron la mitad de la plata para comprar uno. Tampoco teníamos olla y nos donaron una. Eso te da más satisfacción y fuerza para seguir adelante», remarcó.
En cuanto a los alimentos, cocinan gracias a las distintas donaciones que reciben, dado que no han tenido ayuda estatal. «Todo sale a pulmón», aseguró Luis. Quienes se ponen al hombro la olla, además de él, son cuatro jóvenes que se encargan de cocinar. «Lo vamos a sostener mientras sigan las donaciones y hasta que podamos», indicó.
«Tratamos de colaborar con la gente porque no hay otra ayuda. No nos sobra el dinero ni el tiempo, pero lo hacemos de corazón y nos sentimos bien con ello. Incluso muchas veces ponemos dinero de nuestro bolsillo para comprar las cosas», expresó Peralta.
Según dijo, lo que más necesitan es puré de tomate debido a que en cada cena utilizan cerca de 15 cajas. También precisan condimentos, fideos y arroz. Quienes quieran colaborar pueden comunicarse a su teléfono: 3415629901.