Les permitiría pasar los fines de semana en sus casas con sus familias y en la semana salir durante el día
Las autoridades penitenciarias catalanas propusieron este jueves un régimen de semilibertad para los nueve líderes del fallido proceso de secesión de Cataluña de 2017, quienes cumplen condenas de entre nueve y 13 años de prisión por sedición.
El secretario de Medidas Penales, Amand Calderó, máximo responsable del sistema penitenciario en Cataluña, anunció que la decisión adoptada por unanimidad por las tres cárceles en las que están presos los secesionistas «no obedece ninguna consigna política» sino a criterios técnicos.
«No se puede mantener en un grado inferior alguien que puede estar en un grado superior», subrayó el funcionario en conferencia de prensa en Barcelona, refiriéndose a los beneficios penitenciarios que contempla el Código Penal español y otras leyes.
Desde febrero, los nueve políticos secesionistas, entre ellos el ex vicepresidente Oriol Junqueras, pueden salir de la prisión para trabajar o realizar actividades de voluntariado, beneficiándose de un artículo del régimen penitenciario una vez cumplida una cuarta parte de su condena.
La nueva propuesta es que obtengan la calificación de «tercer grado» -semilibertad-, lo que les permitiría pasar los fines de semana en sus casas con sus familias y durante la semana salir en el día y dormir en la cárcel o en un centro abierto. La decisión, no obstante, debe ser ratificada en un plazo de dos meses por el gobierno catalán del secesionista Quim Torra.
Habitualmente el Ejecutivo regional no modifica la propuesta de las autoridades penitenciarias, aunque la Fiscalía puede oponerse a la decisión, lo que dejaría la resolución final en manos del Tribunal Supremo. La oposición de derecha y los ultraderechistas de Vox cuestionan permanentemente los permisos penitenciarios a los líderes secesionistas por considerar que es una cesión del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, quien se mantiene en el poder con apoyo de los independentistas.
Anticipándose al debate político que previsiblemente traerá la decisión, el funcionario catalán remarcó que el tercer grado «no exime de la pena». Además, explico que «las tres Juntas de Tratamiento de prisiones -órgano de decisión en estos temas en cada cárcel- se reunieron de forma simultánea para «evitar coacciones».
Después de dos años y medio en la prisión, los líderes secesionistas cuentan con informes favorables y el aval de los jueces de vigilancia penitenciaria. El tercer grado puede ser incluso más flexible ya que también se amplían los permisos para que puedan pasar tiempo con sus familiares a 48 días al año. También se abre la puerta a que estén todos los días fuera de la cárcel, en libertad vigilada.
Durante el momento más crítico de la pandemia de coronavirus, las autoridades catalanas se plantearon excarcelar a los presos secesionistas, lo que motivó una advertencia del Tribunal Supremo español de que podrían incurrir en un delito de prevaricato.