El expresidente independentista catalán Carles Puigdemont reclamó a las autoridades españolas la retirada del nombre de la empresa de jamones andaluza «Pig Demont», que promociona sus productos con el dibujo de un cerdo que le guarda cierto parecido.
El caso está siendo estudiado por la Oficina Española de Patentes y Marcas que por ahora suspendió cautelarmente la inscripción de la marca en el registro oficial, informó este jueves una portavoz a la AFP.
Si bien el litigio nació en diciembre, cuando el empresario Alberto González rebautizó su empresa con el controvertido nombre, el caso se conoció esta semana a raíz de una entrevista del propietario de «Pig Demont» a la radio COPE.
González aseguró el miércoles en esa entrevista que el nombre de su empresa procede de la unión de las palabras «Pig» (cerdo en inglés) y «du mont» (del monte en francés) y descartó que el cerdo con gafas y una melena negra muy parecida a la de Puigdemont haga referencia al expresidente catalán.
«Él no tiene la propiedad de ese corte de pelo, el logo no refleja la imagen de él (…) Que él se vea reflejado en la caricatura de un porcino es más problema suyo que mío», aseguró González.
El abogado del líder independentista, actualmente en Alemania pendiente de un proceso de extradición a España por rebelión, impugnó el registro de la marca entendiendo que «es ofensiva» y también «por la similitud fonética respecto a un apellido que no tiene autorización para utilizar», explicó Jaume Alonso Cuevillas a la televisión catalana TV3.
Además de los jamones, González comercializa también un vino espumoso con el apellido del líder en el Congreso español del partido independentista ERC, Gabriel Rufián.