Sudafrica e India son los casos más resonantes fuera de América. El país africano acumula la mitad de los casos de todo el continente y el asiático sufre un gran rebrote de la pandemia
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió este viernes que la curva global de la pandemia de coronavirus sigue en ascenso y explicó que la aceleración del contagio se debe, principalmente, al epicentro en América Latina, los brotes sin freno en el sur y oeste de Estados Unidos, y el rebrote en India.
En total, la OMS calculó que ya suman casi 9,5 millones los infectados y más de 484.000 muertos por Covid-19 en todo el mundo, y alertó que día a día el planeta registra números récords de casos nuevos, según la agencia de noticias EFE.
Solo en las últimas 24 horas, hubo 167.000 casos confirmados nuevos y la mayor parte de este nuevo aumento se explica por los brotes en el continente americano y en países muy poblados como India y Sudáfrica.
Sudáfrica, que acumula casi la mitad de los casos de África, registró hoy un récord diario de 6.579 contagios, en medio de un imparable aumento luego que el país aliviara a principios de este mes lo que había sido una de las cuarentenas más estrictas del mundo.
Después de dos días con reportes de más de 100 muertes, el ministro de Salud, Zweli Mkhize, dijo que 87 personas murieron por la Covid-19 en las últimas 24 horas, según la cadena BBC.
En total, el país ya suma más de 2.200 muertos y 118.000 infectados.
En India, en tanto, se reportó el mayor aumento diario de casos, 17.296, lo que dejó al país cerca del medio millón de contagios.
En este contexto, la nación de 1.300 millones de habitantes lanzó hoy una encuesta masiva para detectar síntomas de coronavirus entre los habitantes de la capital, Nueva Delhi, luego que la urbe se convirtiera en la ciudad más afectada por la pandemia.
Además, se desplegó a la policía para que se encargue de hacer cumplir el distanciamiento social y evitar la mezcla de la población en zonas de contención.
Aunque estos brotes preocupan, las cifras que más alertas encienden en el mundo son las del continente americano, especialmente en América Latina.
Brasil protagoniza el peor brote de la región.
Al día de hoy, la potencia latinoamericana registró más de 55.300 muertos y más de 1,2 millones contagiados por coronavirus y, aunque la curva sigue creciendo sin freno a nivel nacional, está desacelerándose en las grandes ciudades donde había tenido los mayores picos y está creciendo en urbes más pequeñas y en otras zonas del país.
En este marco, el gobierno del estado de San Pablo autorizó hoy a la capital, la ciudad homónima, a reabrir los bares, restaurantes, peluquerías, y ampliar los horarios de atención de los comercios en las calles y en los shoppings.
En paralelo, aplicó restricciones a la circulación más importantes a más de cinco regiones del interior del estado, donde solo los servicios esenciales están autorizados: Araraquara, Franca, Araçatuba, Presidente Prudente, Marília, Bauru, Sorocaba, Registro e Piracicaba, según el portal de noticias Terra.
Chile es otro de los países que impulsa el brote en la región.
Hoy superó los 5.000 muertos asociados a la enfermedad y registró otra vez de 4.000 casos diarios que elevaron el total a más de 260.000.
El presidente de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva, Tomás Regueira, destacó que se ven «ciertos signos positivos», pero reconoció que el sistema hospitalario sigue al borde del colapso, según una entrevista con Radio Duna.
Destacó que el nivel de ocupación de camas de terapia intensiva es de 98%: «Todavía estamos llenos, la gente todavía está trabajando mucho y seguimos teniendo mucha mortalidad», afirmó.
México, por su parte, se acerca a los 203.000 casos y superó los 25.000 muertos, lo que nuevamente demuestra que la pandemia sigue muy activa en el país.
Sin embargo, el epicentro en la Ciudad de México, la capital, se está desacelerando y, por eso, la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, anunció que el próximo 1 de julio reabrirán restaurantes y hoteles con una capacidad máxima del 30%, los mercados populares al día siguiente y las peluquerías y centros comerciales el 6 de julio, también con una ocupación y horarios limitados.
Los números de la región se suman a los de Estados Unidos para completar el sombrío escenario del continente americano.
Pese a las crecientes críticas por la gestión de la pandemia, el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, volvió hoy a atribuir el repunte de los contagios al incremento de pruebas hechas a la población.
El país registró ayer un récord diario de 40.000 nuevos casos, lo que confirmó la tendencia en ascenso, y las autoridades sanitarias estimaron que el número real de infectados ronde los 20 millones, diez veces más que lo informado oficialmente.
Si bien Estados Unidos -epicentro mundial del brote- roza los 2,5 millones de casos y los 125.000 muertos, con estados como Texas y Florida en máximos diarios de contagios, el vicepresidente aplaudió los «extraordinarios progresos» de la nación en la lucha contra la epidemia y afirmó que están «reabriendo el país con responsabilidad».
Sin embargo, expertos médicos y la oposición cada vez critican más esta visión oficial y sostienen que el acelerado brote en casi la mitad del país y el aumento de las hospitalizaciones se debe a la reapertura precoz de las economías locales y a la relajación de la población a la hora de aplicar el distanciamiento social.