Mientras continuaba la búsqueda del pesquero Rigel, desaparecido desde el pasado viernes, cientos de familiares de los tripulantes y vecinos de Mar del Plata realizaron esta mañana una manifestación en la que exigieron que continúen los esfuerzos por encontrar a ocho de sus tripulantes.
La concentración se llevó a cabo en la intersección de 12 de Octubre y Avenida de los Trabajadores, con varias banderas argentinas y leyendas como una que advertía que «la corrupción mata» y exigía «ningún hundimiento más».
Gabriela Sánchez, de la entidad #NiUnHundimientoMás, advirtió que ya son «muchos muertos por la corrupción, porque la corrupción no solo es recibir plata sino también no hacer las cosas que se tienen que hacer».
La mujer es hermana de Gustavo Sánchez, capitán del pesquero Repunte, que se hundió casi un año atrás.
Sánchez advirtió, en declaraciones reproducidas por el sitio 0223, que «si las cosas no cambian de una vez por todas, el Rigel no va a ser último».
Este domingo se confirmó que el cuerpo hallado en la zona donde se busca al pesquero, frente a las costas de la provincia de Chubut, es el de Salvador Taliercio, capitán de la embarcación .
El «Rigel» había zarpado el último martes del Puerto de Mar del Plata rumbo al sur para abocarse a la pesca de langostinos y el último contacto que tuvo con las autoridades fue alrededor de las 23:00 del último viernes.
La búsqueda, en la que participan la Armada, Prefectura Naval y también buques pesqueros, se lleva a cabo principalmente a la altura de la costa de la ciudad de Rawson.
En ese contexto, Prefectura informó que en la mañana de este domingo uno de los helicópteros abocados a la búsqueda del barco «Rigel» divisó una mancha de hidrocarburo de 400 metros por 2000 mientras que indicó que continuaba el operativo hallar al pesquero.
En la misma jornada, la madre de uno de los tripulante del pesquero «Rigel», desaparecido desde el último viernes en las costas de Chubut, señaló que su hijo le contó «que el barco estaba roto».
«No daba más el motor, y además se le habían apagado todas las luces. Al principio no salían porque no estaba en condiciones de partir», relató Graciela Godoy, madre del tripulante Nahuel Navarrete.