El ministro de salud Ginés González García se refirió a la posible vuelta del fútbol argentino que se encuentra paralizado desde marzo
El ministro de Salud, Ginés González García, afirmó este sábado que existe «mucha presión» para poder autorizar el regreso del fútbol, pero aclaró que «por ahora» no volverá «ni en el AMBA, ni en el resto del país».
«Hay mucha presión para autorizar el regreso del fútbol. Me encantaría volver a la cancha y entiendo el negocio que implica, pero creo que por ahora no podemos pensar en volver a tener partidos de fútbol, ni en el AMBA ni en el resto del país», sentenciò el funcionario.
En una conferencia de prensa virtual con la Red Argentina de Periodismo Científicos, González García agregó que «aunque sea un deporte profesional y tenga protocolos» le parece «demasiado riesgoso autorizarlo en el corto plazo».
Desde mediados de marzo que el fútbol está paralizado en Argentina y la AFA dio por terminada la temporada, aunque resta aún definir algunos temas en el ascenso, al tiempo que el fútbol sudamericano -en competencias internacionales- también está parado.
El ministro también se refirió a la autorización del gobierno de la Ciudad para que la gente pueda volver a hacer atletismo por las calles, aunque en horario nocturno y de madrugada, y explicó que fue algo que no logró entender.
«Me gusta hacer deporte, pero no entiendo cómo la gente comenzó a salir de esa manera, sobre todo cuando estamos en un pico ascendente de la curva. El lunes pasado realmente fue un desborde, algo fuera de toda lógica y, encima, el martes la situación no mejoró», comentó.
El responsable del área de salud señaló que «el ejemplo de lo que pasó en la Ciudad con los corredores, además, es algo malo para todo el país. Varios gobernadores del interior, cuando vieron lo que estaba pasando en CABA, se preocuparon, porque es algo que suele provocar un efecto imitación».
Ginés González García advirtió, en torno a la pandemia de coronavirus, que «lo peor está por venir» y en ese sentido agregó que se deben concentrar «en no tirar por la borda» lo que han logrado «todos juntos en materia de salud».
«El gran problema que enfrentamos ahora es controlar lo que pasa en el AMBA, y no tanto lo que pasa en el interior del país, salvo en algunas localidades particulares», indicó.