Algunos de los manifestantes tumbaron una estatua y la arrojaron al río. Al menos 27 integrantes de las fuerzas de seguridad fueron heridos
El asesinato de George Floyd en Minneapolis, Estados Unidos, desató una serie de protestas contra la brutalidad de fuerzas de seguridad y el racismo por todo el mundo. En Londres, decenas de miles de personas tomaron las calles este domingo por segundo día consecutivo. Las manifestaciones se vivieron con alto grado de tensión y al menos 27 policías resultaron heridos.
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Con el lema «el racismo es un virus», la multitud alzó su voz de protesta en la capital británica. Los enfrentamientos de este domingo se registraron en Whitehall, en pleno centro de la capital inglesa. En horas de la tarde hubo corridas, detenidos y, al menos 27 policías heridos, dos de gravedad. El diario El Mundo de España indicó que los manifestantes fueron hacia la embajada de los EE.UU.
En Bristol, ciudad situada al oeste de Inglaterra, un grupo de personas, en medio de las protestas, derribó una estatua de Edward Colston, un comerciante de esclavos del siglo XVII, y la hicieron rodar por las calles hasta tirarla al río. Las imágenes difundidas en las redes sociales muestran como uno de los manifestantes puso la rodilla en el cuello de la estatua de Colston tras ser derribada, en una imagen parecida a la del policía que mató al afroamericano Floyd.
En Londres, ocurrió lo mismo, pero en este caso con la estatua de Winston Churchill, ubicada en la Plaza del Parlamento. La estatua de Churchill no fue fue sacada de lugar pero tacharon su apellido y escribieron «Was a racist» («Era un racista», en inglés). En el cuerpo de la estatua, colocaron con cinta un cartón con el lema de estas protestas: «Black Lives Matter».
"Edward Colston":
Porque manifestantes derribaron su estatua en Bristolhttps://t.co/idhB2Tl82F— ¿Por qué es tendencia? (@porquetendencia) June 7, 2020
Ya este sábado, centenares de manifestantes se habían reunido en el centro de Londres en una manifestación pacífica pero que terminó con un pequeño grupo de personas enfrentándose a la policía, cerca de la residencia del primer ministro británico, Boris Johnson. Durante esta manifestación, catorce personas fueron detenidas y al menos diez policías resultaron heridos.