Nuevo gesto. Kristalina Giorgieva apoyó nuevamente la posición de Argentina en torno a la deuda y aclaró que un rechazo podría llevar a los acreedores a no recuperar su dinero
En un nuevo gesto en esta saga de señales favorables hacia la Argentina, el Fondo Monetario Internacional (FMI) volvió a ponderar como positiva la posición del país respecto a la oferta del canje de deuda y dejó en claro de qué lado está en la discusión.
«Agradezco mucho el compromiso de ambas partes (acreedores y gobierno). El objetivo es reestructurar la deuda de una manera que pueda pagarse. Nadie se beneficia de un país que cae del precipicio de la deuda. El país sería excluido de mercados, el crecimiento sufriría, la gente sufriría, además los acreedores no recuperarán su dinero. En ocasiones, es necesario realizar una reestructuración reflexiva «. señaló la titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, en un evento organizado por el Washington Post.
Al igual que supo hacer su predecesora, Christine Lagarde con la administración de Mauricio Macri al otorgarle un abultado crédito y mostrarlo como el ejemplo a seguir, Georgieva no esquiva ninguna oportunidad para apoyar a la administración de Alberto Fernández.
Días atrás, el Fondo emitió un comunicado en donde expresó el respaldo a la última propuesta presentada el 26 de mayo por parte del Gobierno argentino a los acreedores, al indicar que es consistente con el restablecimiento de la sostenibilidad de la deuda con alta probabilidad y considerar que los bonistas deben entender que “existe un margen limitado” para mejorarla.
Si bien no menciona en el comunicado específicamente cuál podría ser ese espacio que todavía tendría la Argentina para mejorar su propuesta, una fuente con conocimiento directo de la posición del Fondo aseguró a Infobae que “es difícil ver como una restructuración con una recuperación en valor presente neto de la deuda por encima del 50% (asumiendo una tasa de descuento del 10%) puede ser consistente con restaurar la sostenibilidad de la deuda.” Cabe recordar que la semana pasada el Gobierno mejoró la oferta de 40 a 47 dólares en términos de valor presente neto, mientras que se estima que la de los acreedores más grandes, conocida el viernes, ronda entre 55 y 60 dólares.