La comediante dialogó con CLG acerca del primer espectáculo teatral emitido por streaming en la ciudad
Por Mario Luzuriaga
El domingo se vivió un evento sin precedentes en el que se emitió por primera vez una obra teatral sin público, vía streaming y bajo el protocolo sanitario, en Plataforma Lavardén. Se trató del show de stand up “Tres mujeres hablan poco”, de Alejandra Gómez, protagonizada por Nadia «Jua Jua» Juárez, Adriana Jaworsky y la propia autora, bajo el marco de #LaSeguimosEnVivo, que lleva adelante el Ministerio de Cultura de Santa Fe.
La actriz y comediante Nadia «Jua Jua» Juárez dialogó con CLG acerca de esta experiencia que vivió ella junto a sus compañeras y la interacción que tuvieron a través de las redes sociales.
—¿Qué te pasa como actriz al hacer teatro en este contexto?
—Me costó caer, 48 horas antes de la convocatoria empecé a darme cuenta de la magnitud de todo esto, y realmente todavía no termino de caer. Me lleva un tiempo procesar funciones que tienen características tan especiales y esta es una de ellas. Recién el domingo tuvimos el encuentro concreto, porque hasta que la hicimos estábamos en medio de conjeturas, con qué nos íbamos a encontrar y demás. Yo sostengo que aunque el público no esté presente, la energía se manifiesta, me pasa mucho cuando viajo y hago castings, que esa energía del público está, y en este caso estuvo a través de las redes.
—¿Cómo hicieron para sortear estas «dificultades» de hacer la función sin público?
—Llegamos a las 17 y la función era las 21. Tuvimos que cumplir con un protocolo re exhaustivo, nos hicieron poner los pies en una batea con lavandina para limpiarnos, después nos rociaron con alcohol las manos y todo alrededor del cuerpo, nos tomaron la temperatura y luego tuvimos que firmar una declaración jurada. Después de esto ingresamos a la sala y tuvimos que estar permanentemente con el barbijo puesto, tapándonos boca y nariz y manteniendo distancia en todo momento. Hasta el saludo final estuvo estipulado que tengamos una distancia prudente. A la hora de la función subimos con el barbijo puesto, tomar el micrófono personalizado y sacarnos el barbijo, que no podíamos apoyar en la banqueta, si bien cada vez que terminaba un número se limpiaba con alcohol. Yo hice un «acting» de donde meterme el barbijo y me lo metí en el escote (risas). Fue shockeante porque teníamos miedo de no olvidarnos los pasos que teníamos que seguir.
—El barbijo fue un elemento más que le sumaron al show.
—Sí, porque la dinámica del stand up es terminar la rutina y dar un abrazo al compañero que sigue y acá había que mantener la distancia, salir por otro lado y no cruzarte con tus compañeras.
—¿Cómo es la sensación de la actriz a la hora de actuar para una sala completamente vacía?
—Uno necesita anclar en la mirada, pero lo que hicimos es poner cabezas con imágenes de famosos en las butacas (risas), yo hice un video previo y me olvidé de hacer la humorada durante la rutina. Nunca imaginé que John Lennon y Freddie Mercury me estuvieran viendo. Entonces en algún punto parecía que había público. Pero hubo dos elementos que tuve en cuenta; por un lado había una pantalla que mostraba el vivo por YouTube nuestro show, entonces la gente dejaba comentarios y me anclé a ellos; y después noté que el camarógrafo, que estaba a cuatro metros de distancia, se reía, entonces jugaba mirando su cámara y anclaba en la mirada del cámara. Personalmente suelo comunicarme con la gente a través de las redes, entonces siento su cercanía. Como experiencia en este contexto, después de estar parados casi 80 días, es muchísimo. Hasta la lengua teníamos trabada y me trabé como cuatro veces (risas).
—¿Ves estas funciones como un proyecto a futuro?
—Alejandra Gómez, autora de la obra, sostiene que esto es lo que se viene. Por supuesto vamos a tener teatro presencial, la vuelta va a ser paulatina, porque la gente va a tomar sus recaudos. Lo positivo del «teatro online» es llegar a públicos de otras latitudes que de otro modo sería imposible. Nos veía gente de Colombia en vivo, que no es lo mismo subir un video a Instagram. También tiene de positivo que nos permite llegar a un público de la ciudad que nunca nos vio y además muchos se comprometieron con el pago de una entrada virtual de manera voluntaria. Me da orgullo que esta iniciativa se de en Rosario y que el Ministerio de Cultura, independientemente el partido político, promueva los espectáculos.