Así lo afirmó Walter Martello, Defensor Adjunto de la Defensoría del Pueblo de Buenos Aires
Tres de cada 10 adolescentes argentinos de entre 13 y 15 años tiene predisposición a fumar y las tabacaleras buscan atraer como clientes a este grupo etario, advirtió Walter Martello, Defensor Adjunto de la Defensoría del Pueblo bonaerense.
Esta situación, que se replica a nivel mundial, motivó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) lanzaran por el Día Mundial Sin Tabaco 2020, que se celebra el 31 de mayo, una campaña con la consigna «Alcemos la voz» destinada a adoptar medidas para proteger a los jóvenes de la manipulación de la industria y evitar que consuman tabaco y nicotina.
Según un comunicado del Observatorio, se estima que en la Argentina tres de cada 10 adolescentes de entre 13 y 15 años tienen predisposición al consumo de tabaco y visitaron puntos de venta donde proliferan avisos, publicidades y/o distintas promociones vinculadas a productos de tabaco.
«Un dato que no debe pasar desapercibido es que la Argentina exhibe los indicadores más altos del continente americano, luego de Bahamas y Chile», destacó Martello.
Los índices son aún más preocupantes si se tiene en cuenta la cuestión de género. Mientras que el 22,5% de los adolescentes de sexo masculino de entre 13 y 15 años tienen predisposición a fumar, ese indicador se eleva al 31,4% en el caso de las mujeres.
Para Martello, las mujeres y niñas constituyen uno de los objetivos más grandes de la industria tabacalera que despliega estrategias comerciales muy costosas, que en algunos casos incluye la contratación de influencers y anuncios en puntos de venta y redes sociales que explotan estereotipos de género.
Sostuvo que la publicidad «vinculan falsamente el consumo de tabaco con conceptos de belleza, prestigio y libertad» y emplean categorías falsas como «light» o «bajo en alquitrán», intentando hacer creer que por ello son «más seguros» o menos nocivos para salud.
Tanto la OMS como la OPS recomendaron taxativamente que se debe prohibir la publicidad de cigarrillos y productos asociados en los lugares de venta.
Del último informe de la OPS se desprende, además, que la tasa de prevalencia de consumo de tabaco en la Argentina sigue siendo elevada y está por encima de lo que registra Estados Unidos y se ubica dentro de las cuatro más altas del continente americano después de Chile, Cuba y Uruguay.
Desde el Observatorio de Adicciones de la Defensoría del Pueblo bonaerense se vienen impulsando distintas medidas para combatir la epidemia del tabaquismo, entre ellas la que solicita que la legislación incorpore nuevas regulaciones antes las estrategias de publicidad y marketing que instrumentan las tabacaleras a través de plataformas digitales, la organización de recitales, fiestas privadas y hasta delivery de cigarrillos.
También se propuso establecer nuevas limitaciones para la venta de cigarrillos saborizados y desarrollar campañas, desde el Estado, para concientizar sobre los daños que produce el vapeo.