Sucedió en la localidad del condado de Kleberg, en Texas
Un conmovedor espectáculo de lealtad canina pudo ser presenciado el pasado viernes por la mañana a la vera de una ruta próxima a la localidad del condado de Kleberg, en Texas, cuando un grupo de rescatistas se acercaron a recoger a una perra atropellada. Allí, junto al cuerpo del animal tendido, hacía guardia y compañía otro perro, que resultó ser su hermano.
Según consigna en la página oficial de Facebook el Centro de Control y Cuidado de Animales del Departamento de Salud de Kingsville, el perro acostado al lado del cuerpo ya sin vida de su hermana estaba «afligido» cuando los rescatistas llegaron a la ruta rural desierta, al responder a un llamado anónimo.
Los rescatistas creen que la perra fue atropellada por algún vehículo que circulaba por la ruta. A la vez, señalaron que al llegar al lugar, el perro que estaba junto a ella les hizo frente con gruñidos y ladridos. «Este pequeño no iba a dejar que nadie se metiera con su hermana», escribieron en su página los integrantes del centro de control animal de la citada localidad.
«Nuestros oficiales de control de animales tuvieron dificultades para convencerlo de que todo iba a estar bien y que estaban allí para ayudarlo», añadía el texto. Tal fue la resistencia del leal animal a que tocaran a su congénere, que el personal que llegó hasta la ruta decidió bautizarlo como «Guardián».
Los integrantes del grupo de rescatistas aseguran que la escena que se encontraron a la vera de la ruta fue realmente «desgarradora» y decidieron publicar la historia para que la gente tome conciencia de cuáles son las circunstancias con las que día a día lidia la gente que se encarga de proteger a los animales de la región.