Manifestantes protestaron contra la ley de seguridad nacional. La normativa presentada por las autoridades chinas prohíbe cualquier intento de "injerencia extranjera" en Hong Kong
La policía de Hong Kong reprimió este domingo una multitudinaria protesta contra la ley de seguridad nacional que busca aplicar el gobierno chino, que restaría libertades a los ciudadanos de la ex colonia británica. Estados Unidos amenaza a Beijing con posibles sanciones si la norma entra en vigencia.
La protesta terminó con al menos 180 detenidos, algunos destrozos materiales y seis heridos: dos transeúntes y cuatro policías. Las autoridades no informaron aún si hubo víctimas entre los manifestantes, como sucedió en represiones pasadas, informó el diario local South China Morning Post.
Los manifestantes, que se habían concentrado en el céntrico distrito comercial de Causeway Bay, fueron reprimidos por los efectivos policiales con gases lacrimógenos y cañones de agua, hasta que los forzaron a dispersarse, contó el medio, citado por la agencia de noticias DPA.
Según los organizadores de la protesta, la legislación propuesta por el gobierno chino representa una amenaza a las libertades civiles, atenta contra la autonomía que mantiene la ciudad de Hong Kong y pone en jaque al principio de «un país, dos sistemas» que rige actualmente.
Esta legislación prohibirá «cualquier acto de traición, secesión, sedición, subversión» contra el gobierno central, además del «robo de secretos de Estado y la organización de actividades en Hong Kong por parte de organizaciones políticas extranjeras».
La denominada ley de seguridad nacional se debate actualmente en la Asamblea Nacional Popular china (ANP) y será aprobada antes de su conclusión el próximo jueves.
Ante la creciente tensión, el canciller chino, Wang Yi, prometió a la población de Hong Kong que la polémica ley no afectará a sus derechos sino que busca controlar la «excesiva injerencia extranjera».
«Esto ha venido provocado por una intromisión extranjera excesiva e ilegal en los asuntos de Hong Kong», que generó una «turbulencia» que puso a la seguridad nacional china «en grave peligro», declaró Wang a la prensa, citado por Europa Press.
«En tales circunstancias, el establecimiento de un sistema legal con sus mecanismos de aplicación para salvaguardar la seguridad nacional en (Hong Kong) se ha convertido en una prioridad», agregó. Pero, en las calles de Hong Kong, no confían en las promesas de Beijing.
Hoy, se vieron banderas de Estados Unidos y escucharon gritos a favor de la independencia de Hong Kong en la protesta. Las menciones a Estados Unidos no pasaron desapercibidas en Washington.
El asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Robert O’Brien, amenazó hoy con imponer sanciones a la potencia asiática para limitar su acceso a los mercados financieros y bancarios internacionales, si la llamada ley de seguridad es aprobada y ejecutada en Hong Kong.
«Me cuesta ver cómo Hong Kong puede seguir siendo el centro financiero asiático en el que se ha convertido si al final China toma el control. A mí me parece un gran error por parte de Beijing. La comunidad financiera no se quedaría en ese lugar», aseguró en una entrevista con el canal de noticias CBS.
«China depende del capital del resto del mundo. Si pierden el acceso a ello, a través de Hong Kong, el golpe que se llevarían (el presidente) Xi Jinping y el Partido Comunista chino sería tremendo», agregó, con una amenaza poco velada.
Las protestas en Hong Kong se suceden desde hace varios años, pero se incrementaron ante la inminencia del tratamiento de la ley por parte de la ANP y sólo han sufrido un paréntesis durante el estado de alarma decretado por Beijing con motivo del estallido de la pandemia de coronavirus.
Hong Kong regresó a manos de China en 1997 tras siglo y medio de dominación británica, después de que Londres y Beijing firmaran en 1984 una declaración conjunta por la que el Reino Unido renunció a su última colonia asiática.
El pacto estableció el mantenimiento durante 50 años de una serie de libertades en ese territorio que no están garantizadas en la China continental.