"Algunos gobernadores consideraron esenciales a negocios que venden alcohol y clínicas que proveen abortos, pero dejaron afuera los templos. Eso no está bien", aseguró el presidente de los Estados Unidos.
Donald Trump habilitó como servicios «esenciales» a los templos religiosos y le pidió a los gobernadores de Estados Unidos a que permitan su apertura este fin de semana. En caso contrario, advirtió que «pasará por encima de ellos».. «Algunos gobernadores consideraron esenciales a negocios que venden alcohol y clínicas que proveen abortos pero dejaron afuera los templos. Eso no está bien. Estoy corrigiendo esta injusticia y las estoy designando como esenciales. Llamo a los gobernadores a hacerlo ahora mismo. Si tienen alguna pregunta, me tendrán que llamar, pero no tendrán éxito”, indicó en un mensaje desde la Casa Blanca.
En este sentido agregó: “Son lugares que mantienen unida a nuestra sociedad y a nuestra población. La gente lo está demandando. Muchos millones de estadounidenses consideran su fe como parte central de sus vidas. Sacerdotes, rabinos e imanes, así como líderes de otras congregaciones, se asegurarán de que todos estén seguros mientras se reúnen para rezar. Los conozco bien. Aman a sus congregaciones. No quieren que nada malo le pase a ellos o a nadie. Los gobernadores deben hacer lo correcto y permitir que abran este fin de semana. Si no lo hacen, los pasaré por encima. Estados Unidos necesita más oración, no menos”.
Sin contestar preguntas ni indicando como hará el gobierno para cumplir con este mensaje, el mandatario se retiró del recinto y le dejó su lugar a la secretaria de Prensa, Kayleigh McEnany, quien manifestó: “Es seguro reabrir los templos siempre y cuando sigan nuestros líneamientos”.