“Estamos en otro camino, el de la prosperidad, no en el camino de la desesperación”, agregó Paulo Guedes, el ministro de Economía brasileño, con el apoyo de Jair Bolsonaro.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, salió esta mañana a hacer un gesto de fortaleza, rodeado por varios ministros, entre ellos el titular de Economía, Paulo Guedes, quien aseguró que el país «va a sorprender al mundo con la recuperación económica».
«No seremos Argentina ni Venezuela», agregó Guedes, durante la reunión en el gubernamental Palacio de la Alvorada.
La imagen del presidente rodeado de sus ministros es un gesto de fortaleza tras la polémica renuncia del superministro de Justicia y Seguridad, Sérgio Moro, quien el viernes salió del gabinete disparando una fuerte denuncia contra Bolsonaro, a quien acusó de cambiar al jefe de la Policía Federal, organismo dependiente de Justicia, para frenar investigación que involucran a sus hijos.
Una segunda lectura de la foto que armó Bolsonaro esta mañana es la de un fuerte respaldo al ultraliberal Guedes frente a los sectores militares que presionan para que el Estado tenga un rol más protagónico en la economía.
«Más intervención fue corrupción en el pasado», replicó a estos militares un fortalecido Guedes desde la Alvorada.
Policía Federal
La Asociación Nacional de Delegados de la Policía Federal (Adpf) le pidió al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que garantice la «total autonomía» del nuevo director general tras la polémica dimisión del ministro de Justicia Sérgio Moro, en desacuerdo con la destitución del jefe de esa fuerza, Mauricio Valeixo, uno de sus hombres de confianza.
En una carta pública difundida en las últimas horas, la Adpf le reclama a Bolsonaro la «total autonomía» del futuro director general de la Policía Federal, que cumple funciones de investigación en la instrucción de causas judiciales, para formar un equipo sin la obligación de transmitir información al gobierno federal, de tal forma que se despeje todo tipo de dudas sobre la posible injerencia política en la institución.
Además, la Adpf solicita poder elegir a su propio director general y tener autonomía financiera suficiente, según informaciones del portal de noticias local G1, citado por Europa Press
«Si los hechos presenciados esta semana no hubieran ocurrido y no estuviéramos experimentando estas circunstancias, no habría una crisis de confianza instalada tanto por parte de la población como de los delegados de la Policía Federal», señala la carta pública.
Tal y como ha expresado la entidad, la adopción de las medidas solicitadas permitiría restaurar la «confianza» en la Policía Federal y «disipar toda duda» sobre su funcionamiento e independencia.
Moro renunció el último viernes a su cargo en desacuerdo con el desplazamiento de Valeixo dispuesto por Bolsonaro y, en una conferencia de prensa, denunció que, con esa decisión, el mandatario procuraba evitar que la Policía Federal avanzara en la investigación de causas que involucran a los hijos del presidente.
En respuesta a estas acusaciones, que pueden ser fundamento para un juicio político en su contra, Bolsonaro aseguró que Moro habría estado de acuerdo con sustituir a Valeixo, siempre y cuando tal cambio se produjese»después del mes de noviembre» y cuando fuese nombrado miembro del Tribunal Supremo.
Además, en su carta pública, la Adpf le exige a Bolsonaro enviar de forma urgente un proyecto de ley al Congreso para establecer un mandato para el director general y que la elección del mismo se realice a través de una lista presentada previamente por el grupo de delegados al presidente.
Dicha ley debería prever una garantía de autonomía para el jefe de la Policía, que puede elegir o retirar a los titulares de los puestos internos.
«Tales medidas construirán un ambiente institucional menos tenso y ciertamente constituirán un legado de su gobierno a Brasil, contribuyendo a la disipación de dudas sobre sus intenciones en relación con la Policía Federal», afirma la Asociación Nacional de Delegados de la Policía Federal en el texto.
Asimismo, la entidad señala que no existe una disposición legal ni obligación alguna de realizar comunicaciones personales, generales y diarias al presidente del país.
El viernes pasado, Bolsonaro dijo que quería que Moro proporcionara informes diarios sobre las actividades de la Policía Federal para «poder decidir bien el futuro de la nación».