Este domingo se produjeron 433 muertes por el Covid-19, aunque el número va en descenso en relación a los últimos días. Mientras, el gobierno ya trabaja en una nueva etapa con una cuarentena más abierta
Mientras el gobierno anunció que «ya está trabajando» en la denominada «fase de convivencia» con el coronavirus que empezará una vez que se levante la cuarentena vigente hasta el 3 de mayo, Italia informó hoy una nueva baja del número de víctimas, que por segundo día consecutivo quedó bajo las 500 personas.
Según los datos divulgados por el Departamento de Protección Civil, 433 personas personas murieron en las últimas 24 horas, en una baja de casi el 10% respecto a las 482 informadas ayer, para un total de 23.660 desde iniciada la pandemia
Según la estadística oficial, el país ya consolidó más de dos semanas de bajas diarias en los pacientes internados en terapia intensiva, quitando presión al sistema sanitario.
Con 486 casos activos más que ayer, el total de infectados actualmente es de 108.257, según la Protección Civil, con una tasa del 74% que se mantiene en aislamiento domiciliario con pocos o nulos síntomas.
Este domingo, el primer ministro Giuseppe Conte confirmó que su gobierno «está trabajando» para flexibilizar la cuarentena a partir del 4 de mayo para entrar en un fase «de convivir algunos meses» con el coronavirus «en condiciones de máxima seguridad».
«Estamos trabajando en algunas propuestas de flexibilización de las medidas, de forma de poder convivir con el virus en los próximos meses en condiciones de máxima seguridad», dijo Conte en una entrevista que publica el diario Il Giornale.
Según Conte, el gobierno espera una fase más flexible de las restricciones «teniendo bajo control la curva epidemiológica y las condiciones de stress del sistema sanitario y hospitalario local».
Italia, donde hasta el momento fallecieron 23.660 personas a causa del coronavirus, mantiene hasta el 3 de mayo la suspensión de clases, cierre de negocios y paralización de toda «industria no esencial».
En ese marco, Conte señaló que desde el 4 de mayo se piensa en «retomar las actividades productivas actualmente suspendidas según un programa bien articulado que contemple el cuidado de la salud y las exigencias de la producción».
Según el primer ministro, el plan de reapertura será «homogéneo en todas las regiones», desestimando así el pedido de los gobiernos locales del norte del país que pretendían una flexibilización temprana de las medidas.