Desde Casa Rosada celebraron el acercamiento de posiciones con el gobierno porteño que comanda Horacio Rodríguez Larreta
En medio de la lucha contra la pandemia de coronavirus, el Gobierno nacional celebró el acercamiento de posiciones con el Ejecutivo porteño que comanda Horacio Rodríguez Larreta, quien en las últimas semanas no se sumó a las consignas de los cuadros más duros de su propio partido.
En Casa Rosada entienden que para enfrentar la pandemia, tanto desde el punto de vista sanitario como desde el impacto económico que generan las medidas de aislamiento, es importante mostrar una dirigencia política abroquelada.
Por eso, remarcaron que contar con el apoyo de la oposición en las políticas adoptadas es un punto clave que debe ser acentuado a medida que aumenten los conflictos que generan rispideces con el mundo empresarial.
«Hablar hoy de oposición, es hablar de Horacio Rodríguez Larreta y de algunos intendentes», destacaron fuentes de la Casa Rosada NA.
«La pelea más importante contra el coronavirus está en la Ciudad de Buenos Aires y en la Provincia. Es donde conviven todos los puntos que están en conflicto: está concentrada gran parte de la gente, de la actividad económica y de los contagiados», remarcaron.
En ese sentido, destacaron la labor del alcalde porteño y su trabajo coordinado con el gobernador Axel Kicillof y el presidente Alberto Fernández, luego de que el coronavirus congelara la disputa con la Ciudad por el recorte de la coparticipación que planeaba la Nación.
Un punto importante que observaron es la batalla que se libró la semana pasada cuando, luego de los despidos producidos en Techint, se iniciaron cacerolazos para que la dirigencia política bajara sus sueldos para enfrentar la pandemia.
Sobre eso, el Presidente expresó: «Es mucho más razonable pedirles un esfuerzo a ellos (haciendo referencia a los empresarios que ingresaron al último blanqueo) que a Carla Vizzotti (la secretaria de Acceso a la Salud), que gana 150 mil pesos y está todo el día en la calle viendo cómo combatir el coronavirus».
Pero lo que más llamó la atención de la dirigencia oficialista fue la respuesta que surgió de la Ciudad ante este planteo, ya que el gobierno porteño expresó que acompañaría «la línea que siga Nación».
Además, la sintonía que comenzó en la lucha pandemia se expande a otras áreas de Gobierno: no solo hay aprobación de la Nación al ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, sino que también destacan el trabajo de Rodríguez Larreta en las áreas de Desarrollo Urbano -comandada por María Migliore- y el IVC -a cargo de Juan Maquieyra-, que pusieron en marcha un operativo para aislar a mayores de 70 años que viven en barrios populares y no tienen las condiciones para cumplir con las exigencias de la cuarentena.
«Entendemos que en este momento no hay espacio para la especulación. La relación (con la Ciudad) es cordial y diaria.
Cada ministro está trabajando con su par, coordinando el día a día», resaltaron fuentes de la administración que encabeza Kicillof, la otra pata del trío.