El centro comunitario que asiste a 400 personas en la zona Sorrento y Travesía decidió abrir en cuarentena debido a los reiterados pedidos de asistencia y lleva adelante una campaña de donaciones destinada a quienes más lo necesitan
Por Diego Carballido
El Centro Cultural y Comedor Dorita funciona en Pacheco 657 y, antes de la declaración de la cuarentena para prevenir la propagación del coronavirus, cocinaba cuatro veces a la semana raciones de comida para 400 personas. Vecinos de barrio Sarmiento, Empalme Graneros y barrio Industrial se acercaban hasta el espacio que funciona en la zona de Sorrento y Travesía en busca de asistencia de parte de los voluntarios que llevan adelante el comedor.
«En un primer momento, cuando se declaró el aislamiento, por una cuestión de prevención, decidimos cerrar la institución. Más que nada para resguardar a las cocineras que están dentro de la población de riesgo», compartió Facundo Vijande, referente del Centro Cultural Dorita, en diálogo con CLG. Sin embargo, los reiterados pedidos de asistencia que seguían llegando al teléfono de Vijande derivaron en un reparto de “toda la mercadería que disponíamos entre las instituciones amigas y también armamos bolsones que fuimos entregando a los vecinos”. Hasta que finalmente este jueves 9 de abril decidieron volver a cocinar, teniendo en cuenta todas las medidas de seguridad del caso. «Trabajamos a puerta cerrada, entregamos la comida a través de una ventana y no tenemos prácticamente contacto con la gente», aclaró Vijande.
Existe en el Centro Cultural Dorita un trabajo coordinado de voluntarios que son quienes cocinan y reparten la comida además de “reiterar todo el tiempo a la gente que se acerca sobre de la importancia de las medidas de seguridad. Sobre todo el distanciamiento social y la utilización de alcohol en gel”, agregó Vijande.
A causa de que algunos de los voluntarios obtuvieron el permiso de circulación, durante los días que el comedor estuvo cerrado, se realizó un reparto de bolsones que le permitieron tener contacto en cuarentena con la realidad de los barrios que asisten habitualmente. Al respecto, Vijande aseguró: “La gente, en general, está en sus casas, pero existe una idea generalizada de que la enfermedad no les va a afectar. En ese sentido, nosotros reiteramos todo el tiempo que realmente le puede pasar a cualquiera».
Respecto a las necesidades presentes en los barrios donde llega la ayuda el Comedor Dorita, Vijande advirtió: «Se puede venir una crisis económica peor que las anteriores que ya vivimos. Si bien se recibió la ayuda que envió el Estado, vamos a llegar a un momento en el que la gente va a tener que salir a la calle a ganarse el mango».
Para poder sobrellevar adelante este momento, el Centro Cultural Dorita apela a la solidaridad y a la ayuda de quienes quieran colaborar con este espacio comunitario que asiste a vecinos de barrio Sarmiento, Empalme Graneros y barrio Industrial.
«Más que nada estamos necesitando alimentos no perecederos: leche, arroz, fideos, puré de tomate, masitas y elementos de limpieza, como por ejemplo jabón blanco, que es de mucha utilidad en estos días», detalló Vijande.
Las donaciones se pueden acercar hasta Pacheco 657, donde funciona Dorita, y también existen voluntarios que en casos excepcionales pueden coordinar para pasar a buscar las donaciones “sobre todo la gente que no puede trasladarse y quiere ayudar», explicó Vijande. También es posible comunicarse por WhatsApp al 341- 5988897.
https://www.facebook.com/comedorycentroculturaldorita/photos/a.202345116913972/831170720698072/?type=3&theater