El primer ministro anunció que mantendrá hasta el 13 de abril las medidas restrictivas que buscan frenar la propagación del virus
El gobierno italiano apuesta a una rápida salida del pico de casos de coronavirus en el que entró esta semana para iniciar luego una larga «fase de convivencia» con el coronavirus que -según expertos- podría estirarse hasta más allá de julio.
«Quizás en el verano el virus se transmita menos, pero en otoño está el riesgo de que vuelva a aparecer», planteó este jueves, en declaraciones al diario Repubblica, el director de enfermedades infectivas del Instituto Superior de Sanidad (ISS), Giovanni Rezza.
«El virus circulará hasta que se cree la inmunidad de masas, y con suerte esto no sucederá en poco tiempo porque significaría matar a muchas personas y estresar el sistema de salud de una manera inaudita, o circulará hasta que se encuentre una vacuna», planteó Rezza.
El primer ministro Giuseppe Conte anunció en la noche del miércoles que mantendrá hasta el 13 de abril las medidas restrictivas que buscan frenar el coronavirus, aunque dejó también en claro que el levantamiento de las restricciones dependerá exclusivamente de lo que decida el comité técnico-científico que asesora al gobierno.
Uno de los integrantes del comité, Roberto Bernabei, opinó en declaraciones al diario Il Messaggero que no considera «realistas» las hipótesis de una erradicación de los nuevos contagios a mediados de mayo. «Creo que deberemos tratar con el virus hasta julio», agregó Bernabei.
«La normalización total no se va a dar hasta que no haya una vacuna contra el virus que proteja a los sectores más vulnerables, y eso podría ser en un año», planteó este jueves el virólogo Fabrizio Pregliasco este jueves a la cadena pública Rai.
Según Conte, las medidas restrictivas que incluyen desde la suspensión de clases hasta la prohibición de desplazamiento entre regiones, deberán levantarse de forma gradual para iniciar «una fase de convivencia con el virus»:
De hecho, el miércoles el Ministerio del Interior publicó una circular que habiliotó los paseos de padres e hijos menores de edad, una medida que generó una fuerte disputa entre el gobierno central y las regiones más golpeadas por la pandemia, que calificaron de «mensaje devastador» a la norma.
Luego de esa etapa, que según el diario Corriere implicaría una apertura escalonada de industrias y comercios, dejando para el final a discotecas y espectáculos públicos, el país podría entrar a «una nueva fase, de reconstrucción» del funcionamiento del país.
Según el presidente del Instituto Superior de Sanidad (ISS) Silvio Brusaferro, el país llegó a una «meseta de casos que podría durar unos días más», en lugar de un pico de contagios de un día, y después se iniciará un descenso diario «si se mantienen las medidas actuales».
Italia registra hasta el momento más de 13.000 víctimas positivas con covid-19 y superó los 110.000 contagios, aunque solo dos regiones del norte, Lombardía y Emilia-Romaña, concentran el 70% de los fallecidos y el 54% de los casos positivos.