Tras abrir brevemente en verde, los principales mercados europeos caían este lunes en un mercado volátil con el paso marcado por el avance del coronavirus
Mientras las medidas de los países para frenar la pandemia se endurecen, las consecuencias sobre la economía hacen estragos en los mercados. Las bolsas caen y el petróleo se derrumba a niveles mínimos en casi 20 años.
Tras abrir brevemente en verde, los principales mercados europeos caían este lunes, en un mercado extremadamente volátil, que sigue recibiendo de lleno el impacto del coronavirus. La bolsa de Londres cedía 1%, Fráncfort 0,1%, París 0,7%, Milán 0,6% y Madrid 0,1%.
Las principales bolsas de la región Asia-Pacífico cerraron en baja la jornada, continuando la tendencia al cierre de la semana pasada. En Japón, el Nikkei perdió 1,57%, mientras que la de Hong Kong cayó un 1,32%. En cuanto a Shanghai, China, cedió 0,9%.
Las preocupaciones por la propagación del covid-19 y el impacto económico de las cuarentenas en todo el mundo continuó dominando los mercados cambiarios también, pero los movimientos de los precios del inicio de semana estaban relativamente contenidos.
El dólar subía frente a grandes divisas y otras más riesgosas de mercados emergentes. El yuan de China en los mercados internacionales caía después de que el banco central local recortara una de sus tasas de interés.
Preocupante baja del precio del petroleo
La caída de la demanda como consecuencia de las medidas de confinamiento implementadas en varios países para contener la propagación de la pandemia, sumada al aumento del bombeo de crudo por parte de Arabia Saudí, arrastraron la cotización del precio del barril de referencia para Estados Unidos por debajo de los 20 dólares, un nivel desconocido desde 2002.
El Brent cotizaba por debajo de los 24 dólares por barril, frente a los 24,93 dólares del cierre del viernes. En lo que va de año, el barril acumula una baja del 65%.
Analistas estiman que la demanda mundial bajará en entre 15 millones y 20 millones de barriles por día, un desplome del 20% frente al año pasado, por lo que serán necesarios recortes masivos de producción