El presidente de Estados Unidos que movilizará a las tropas a los estados de California, Nueva York y Washington, lo tres más afectados por la pandemia
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció hoy que dispuso movilizar la Guardia Nacional a los estados de California, Nueva York y Washington, lo tres más afectados por la pandemia de coronavirus que provocó 384 muertos y más de 30.000 infectados en el país, y que tres gigantes automotrices fabricarán respiradores.
“El gobierno federal financiará el 100% del despliegue de las unidades de la Guardia Nacional para que cumplan las misiones aprobadas para detener el virus”, dijo Trump esta noche, en un mensaje televisado desde la Casa Blanca.
“Los gobernadores seguirán al mando; vamos a seguirlos y esperamos que puedan cumplir con la misión, creo que lo harán; he hablado hoy con los tres gobernadores, hace un rato, y están muy contentos con lo que estamos haciendo”, agregó, según la televisora CNN y la agencia de noticias Europa Press.
La medida incluye el envío de cuatro hospitales móviles con 1.000 camas a Nueva York, ocho con 2.000 camas a California y tres con 1.000 camas a Washington, además de un hospital naval en la costa oeste y otro en la costa este, describió el presidente.
Trump ya aprobó declaraciones de catástrofe para Nueva York y Washington, y la prensa local esperaba que pronto se dictara una medida similar para California.
El último reporte de CNN, la fuente usualmente más consultada en el caso de Estados Unidos, señaló esta noche que ya computaban 30.565 casos de coronavirus y 384 fallecidos por la enfermedad en el país.
El último balance, de ayer, apuntaba a al menos 25.000 casos y unos 300 fallecidos, lo que supone un importante incremento en las últimas 24 horas a pesar de las restricciones impuestas por las autoridades para evitar contagios.
Más temprano, Trump anunció que las gigantes automotrices General Motors y Ford, así como el conglomerado tecnológico y automotor Tesla, fabricarán respiradores de soporte vital para enfrentar la escasez provocada por la pandemia de coronavirus.
“Ford, General Motors y Tesla tienen el visto bueno para fabricar ventiladores y otros productos metálicos, ¡RÁPIDO!”, escribió el mandatario en Twitter, apenas cinco días después de firmar la Ley de Producción de Defensa, que le permite imponer a la industria privada qué producir en momentos de crisis, una ley que data de 1950, en plena Guerra Fría.
Hasta ahora Trump sostenía que cada estado debía procurarse como pudiera los suministros y equipos médicos que necesitaban para enfrentar la pandemia.
Ayer el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, había pedido otra vez a las autoridades federales que aumenten el suministro de respiradores en el estado, en donde ya se registran más de 10.000 casos de infectados.
«Necesitamos 30.000 respiradores (de asistencia pulmonar), solo tenemos 6.000. Por lo menos tenemos esos», declaró Cuomo.
Además de enfrentar críticas por su escasa gestión nacional del coronavirus -las principales medidas de prevención como confinamientos generales fueron asumidas por los gobernadores-, Trump es muy cuestionado porque en 2018 su gobierno cerró la oficina especializada en la lucha contra pandemias de la Casa Blanca, lo que provocó que los especialistas que trabajaban allí renunciaran.
Por otra parte, hoy se conoció que el senador Rand Paul se convirtió en el primer integrante de la Cámara Alta en contraer la enfermedad.
Paul, del estado de Kentucky, «se siente bien y está en cuarentena», señaló la cuenta de Twitter del legislador.
La información detalló que el político, quien es un paciente «asintomático», se sometió al test por precaución debido a sus viajes y eventos, y sin que tuviera conocimiento «de ningún contacto directo con ninguna persona infectada».
«Hace diez días, nuestra oficina en DC (Distrito de Columbia, donde está Washington) comenzó a operar de forma remota», agregaron los mensajes en Twitter, según los cuales ningún funcionario de su equipo «ha tenido contacto con el senador».
El 14 de este mes el vicepresidente Mike Pence anunció que se sometería junto a su esposa, Karen, a la prueba del coronavirus después de que un colaborador suyo diera positivo, pero horas más tarde se informó que ambos resultaron negativos.
El 18, el representante republicano Mario Díaz-Balart y el demócrata Ben McAdams anunciaron en sendos comunicados que dieron positivo por Covid-19, convirtiéndose así en los primeros congresistas estadounidenses infectados por esta nueva enfermedad.
Varios congresistas y senadores como los republicanos Ted Cruz o Paul Gosar han realizado cuarentenas en las últimas semanas tras estar en contacto con personas contagiadas, reprodujo la agencia de noticias EFE.
El alcalde de Miami, Francis Suárez, dio positivo por coronavirus después de estar en contacto con miembros de la comitiva del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que contrajeron la enfermedad.
El gobernante brasileño cenó el 7 de este mes con Trump en el club privado que el líder estadounidense tiene en Mar-a-Lago (Florida).