En busca de concientizar, la Iglesia expusó medidas a tomar para prevenir el covid-19
La iglesia católica suspendió la celebración de los 500 años de la primera misa en territorio argentino y anticipó algunas modificaciones en los ritos, para favorecer la etapa de contención que se realiza en las provincias de Santa Cruz y Tierra del Fuego debido al avance del coronavirus en el mundo.
La suspensión de la celebración ecuménica se iba a realizar en Puerto San Julián el próximo 1 de abril, con motivo de los 500 años de la llegada de Hernando de Magallanes a esa bahía y la celebración de la primera misa en territorio argentino.
El obispo diocesano de Río Gallegos, Jorge García Cuerva, aseguró que la decisión fue analizada junto al intendente de San Julián y las autoridades provinciales.
«Más serenos pensaremos en la reprogramación», agregó el obispo y contó que ya habían sido informados el Papa Francisco y el delegado pontificio que iba a llegar desde Uruguay para la celebración.
«Al mismo momento que se suspendió nuestro encuentro, se suspendió el gran acontecimiento en San Fernando del Valle de Catamarca», resaltó el referente católico; al tiempo que insistió en que «la esperanza de que el papa nos visite está en todo momento» porque «la esperanza siempre está y él siempre tiene ganas de venir a la Argentina».
«Durante Semana Santa se guiarán por las medidas que se sugieren para celebraciones litúrgicas por parte de la Conferencia Episcopal Argentina, como evitar el saludo de la paz y que la comunión se dé en las manos de los feligreses», informó a Télam.
«Seguramente el 1 de abril estaré en San Julián» anticipó García Cuerva al lamentar que todos los preparativos quedaron truncos y que por eso «la sensación de hoy es de alivio y de paz por la responsabilidad que implica la situación».
Finalmente, el prelado dijo que el mensaje de los 500 Años debe seguir siendo con «una mesa para todos» porque «si hay alguien antigrieta ese es Jesús».