El presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y el mandamás de River mantuvieron una reunión y avanzaron para crear un nuevo torneo a partir de junio
El presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y el mandamás de River mantuvieron una reunión y avanzaron para crear un nuevo torneo a partir de junio
Claudio «Chiqui» Tapia, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), y Rodolfo D’Onofrio, mandatario de River Plate, mantuvieron hoy una reunión privada y dieron otro paso para ponerle final a la Superliga Argentina de Fútbol (SAF) y crear la nueva Liga Profesional.
La charla entre los dirigentes duró poco más de una hora y desde el entorno de la AFA la definieron como «positiva», teniendo en cuenta la fría vinculación entre ambos.
D’Onofrio no había estado en la cena de anoche en la casa de Tapia en Los Cardales, a la que sí fueron Marcelo Tinelli (San Lorenzo), Jorge Ameal (Boca), Nicolás Russo (Lanús), Víctor Blanco (Racing), Hugo Moyano (Independiente), Lucía Barbutto y Eduardo Spinosa (Banfield) y Sergio Rapisarda (Vélez).
También asistieron Pascual Caiella (Estudiantes de La Plata), Gabriel Pellegrino (Gimnasia y Esgrima La Plata), Cristian D’Amico (Newell’s Old Boys de Rosario), Ricardo Carloni (Rosario Central), Adrián Pérez (Argentinos Juniors).
A su vez, en una de las cabeceras estuvo Marcelo Achile (Defensores de Belgrano), puntal político de de «Chiqui» y hombre fuerte de la Primera Nacional.
D’Onofrio prefirió mirar desde afuera la escena, pero al enterarse de la adhesión de otros ocho -salvo Talleres de Córdoba, Defensa y Justicia y Atlético Tucumán- decidió dar el paso y juntarse hoy.
Los temas que se trataron, según le informaron a Télam, fueron cómo arribar a la creación de la Liga Profesional, el adelantamiento de las elecciones en AFA -de marzo 2021 a octubre 2020- y el lugar que tendrá River en las nuevas estructuras como aspectos relevantes.
También sobre la mesa se tiraron los posibles cambios en la televisación de los partidos, ya que existe la chance de volver a un esquema con cinco codificados y el resto repartido entre cable básico y canales de aire que compren los derechos.
En principio, D’Onofrio escuchó a Tapia y después pidió un lugar en la vicepresidencia del nuevo comité ejecutivo y el ofrecimiento que recibió (y en principio aceptó), es el de ir como vice segundo.
Otro que ganó terreno es Blanco, que dio el salto siendo parte del cónclave en zona norte (cuando olfateó la despedida del certamen que nació hace tres ediciones), y se acomodaría como secretario general de la Liga Profesional. Además,Tinelli (San Lorenzo) y Ameal (Boca) tendrían una vicepresidencia cada uno.
Ya esa variante marcará una diferencia con el comité actual, en el que no están River y San Lorenzo, debido a que cuando «Chiqui» ganó el sillón histórico de Julio Grondona (40 votos positivos y tres abstenciones) había diferencias marcadas entre ellos.
Está claro que la Superliga pasará a la historia dentro de dos semanas cuando posiblemente se defina el último campeón, entre el propio «Millonario» y Boca, y D’Onofrio buscará acomodarse en el nuevo contexto.
Por otro lado, en el flamante escenario predominarán las figuras de Tinelli, Ameal y Russo, quienes apostaron de manera tempranera por el regreso a la AFA, más allá de la autonomía que tendrá la Liga Profesional.
De hecho, el tridente dirigencial encabezó la arremetida de postergar el inicio de la Superliga en enero, aunque por un voto no lo consiguieron, y allí sembraron todo para dejar de lado a la entidad que maneja Mariano Elizondo, hombre del riñón de Tinelli cuando se creó, y en la que pisa fuerte River con la vicepresidencia de Jorge Brito.
Por esos días, Ameal jugó fuerte en los medios de comunicación y afirmó que no se toleraba más «el doble comando» en el fútbol argentino, y junto a él salieron diferentes figuras de la política deportiva para comenzar el golpe final.