Este jueves el Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº 3 de Rosario inicia el juzgamiento a una organización narco. Hay 12 personas acusadas
Este jueves el Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº 3 de Rosario inicia el juzgamiento a una organización narco. Hay 12 personas acusadas
El juicio a una organización narco que operaba desde la cárcel santafesina de Piñero comenzará este jueves en el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 3 de Rosario.
Durante el debate oral y público se juzgará la responsabilidad de doce personas acusadas de conformar una organización dedicada al transporte, tenencia y comercialización de estupefacientes, con la particularidad de que el presunto líder de la banda estaba detenido al momento de los hechos en la Unidad XI de Piñero, desde donde impartía las directivas al resto de los imputados.
Según publicó el portal Fiscales.gob.ar, se trata de otro desprendimiento de causas que se fueron formando tras las intervenciones producidas originariamente en «Los Patrones» y luego en «Smolski», que en diciembre pasado derivó en condenas para 17 personas.
Durante la investigación se llegó a quien sería el líder de la organización, Leandro Vilches, y es quien, según el Ministerio Público Fiscal (MPF), digitaba los movimientos de la banda desde su lugar de detención a través de su pareja Gisela Bocutti, su hermana Gisela Vilches, entre otros.
En esta causa serán juzgadas 12 personas por el delito previsto en el artículo 5, inciso c. de la Ley 23737 agravado por la intervención de tres o más personas.
La investigación culminó en abril de 2017 con el secuestro de 82 panes y medio de marihuana que arrojaron un peso de 50, 151 kilogramos, que eran trasladados en un auto en el que iban dos de los imputados; y también con la incautación de otros 39 panes de la droga por un total de 25,164 kilogramos, que estaban siendo llevados en un vehículo en el que iba otro de los acusados.
Desde el MPF advirtieron que existe una lógica común entre las causas y que tiene que ver con personas presas en distintas cárceles santafecinas, desde donde, a través de la utilización de teléfonos celulares, se imparten órdenes y se digitan las operaciones de distribución y venta de drogas.