Será este miércoles y plasmará sus ideas sobre el Sínodo de obispos dedicados al pulmón verde mundial
El papa Francisco publicará este miércoles «Querida Amazonía», la exhortación apostólica en la que plasmará sus ideas sobre el Sínodo de obispos dedicados al pulmón verde mundial del pasado octubre, con la que se espera que introduzca la categoría de «pecado ecológico» en el catecismo y que, también, podría incluir algún tipo de apertura hacia la ordenación de sacerdotes casados en comunidades indígenas aisladas.
La exhortación, que según fuentes vaticanas consultadas por Télam es un texto de unas 40 páginas, será presentada pasado mañana al mediodía en el Vaticano, en una conferencia de prensa de la que participarán los cardenales Lorenzo Baldisseri y Michael Czerny.
El texto plasmará las ideas de Jorge Bergoglio sobre el encuentro de obispos de 2019 dedicado a la región, tras el que los participantes le hicieron llegar al pontífice sus conclusiones, con fuertes críticas al modelo extractivista, un reclamo de mayor cuidado del ambiente, pedidos de defensa de los movimientos de campesinos y derechos humanos de la zona, y la posibilidad de una apertura a la ordenación sacerdotal de hombres casados en casos específicos.
La posible flexibilización del celibato en casos puntuales para comunidades aisladas y de pocas o nulas vocaciones, aparece como el eje de mayor disputa con los sectores conservadores de la Curia Romana, al punto que fue la propuesta que más votos negativos recogió al terminar el Sínodo de octubre pasado.
En ese sentido, el texto fue terminado por Francisco en los primeros días de enero, antes de la polémica que envolvió al papa emérito Benedicto XVI, a su secretario Georg Gänswein y al cardenal guineano Robert Sarah en la publicación de un libro con una fuerte defensa del celibato que fue leído como un desafío a Bergoglio de parte de los sectores conservadores.
Si bien tras varios cruces la firma de Benedicto fue removida de la tapa del libro, Joseph Ratzinger mantuvo su autoría sobre varios pasajes internos de la obra que apuntan contra la posible apertura a los sacerdotes casados. Además, en la última semana, el Vaticano confirmó que redujo las tareas asignadas a Gänswein al frente de la Prefectura de la Casa Pontificia, en una posible sanción a su rol en la participación de Ratzinger en el libro promovido por los sectores contrarios a Francisco.
En octubre, el texto final del Sínodo reclamó, citando el documento conclusivo del Concilio Vaticano II, la posibilidad de «ordenar sacerdotes a hombres idóneos y reconocidos de la comunidad, que tengan un diaconado fecundo y reciban una formación adecuada para el presbiterado, pudiendo tener familia legítimamente constituida y estable, para sostener la vida de la comunidad cristiana mediante la predicación de la Palabra y la celebración de los Sacramentos en las zonas más remotas de la región amazónica».
Ese pedido de los participantes, expresado en el punto 111 del texto, fue sin embargo el más rechazado de los 120 del documento, con 128 votos a favor y 41 en contra.
El texto de octubre, que sirvió como base a Francisco para su nueva exhortación, refiere además que se continúe el estudio del diaconado femenino, para el que ya Bergoglio instituyó en 2016 una comisión de estudio.
También, en una de las propuestas más innovadoras de octubre, y que será reafirmada el miércoles por el Papa, los participantes pidieron incluir «el pecado ecológico» entre la lista de faltas para los cristianos y lo calificaron como «una acción u omisión contra Dios, contra el prójimo, la comunidad y el ambiente».
«Querida Amazonía» será el quinto texto pontificio de Bergoglio como Papa, tras la encíclica Laudato si’ (2015) y las exhortaciones Evangelii Gaudium (2013); Amoris Laetitia (2016); Gaudete et Exsultate (2018) y Christus Vivit (2019).