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Decenas de personas murieron por fuego cruzado entre sirios y turcos


Los ataques se dieron Idleb, Hama y Latakia

Los ataques se dieron Idleb, Hama y Latakia

La tensión entre Siria y Turquía escaló este lunes tras la muerte de cuatro soldados turcos en un bombardeo del Ejército sirio en el marco de la ofensiva contra fuerzas rebeldes en la provincia de Idleb y la inmediata represalia de Ankara que mató al menos a 13 uniformados sirios en ese bastión rebelde y en las provincias vecinas de Hama y Latakia.

El intercambio nocturno, el más mortal desde que Turquía desplegó tropas en Siria en 2016 y aumentó las tensiones entre ambos países, se inició con el bombardeo sirio sobre las posiciones turcas en Idleb, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que monitorea el conflicto desde Londres con una red de informantes en terreno,

El ataque mató a cuatro soldados turcos e hirió a otros nueve pese a la coordinación previa establecida entre ambas naciones para saber dónde está desplegada cada fuerza en esta conflictiva región. El Ministerio de Defensa ruso dijo que Ankara no había avisado previamente sobre sus movimientos de tropas en el momento del incidente.

Los ataques con cohetes de represalia por parte de Ankara en posiciones sirias fueron ordenados de inmediato y mataron al menos a 13 soldados del país árabe e hirieron a otros 20, según el Observatorio. La agencia estatal de noticias siria SANA dijo que el Ejército sirio no había sufrido bajas y que la operación aún estaba «en curso».

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, había advertido la semana pasada que su país tomaría medidas ante el avance de las tropas del presidente Bashar Al Assad en la provincia de Idleb, que provocó la huida de decenas de miles de civiles en dirección a la frontera turca.

El avance del Ejército sirio en la región se profundizó la semana pasada cuando tomó el control total de la ciudad de Maarat al Numan, la más importante de la provincia y último bastión de las fuerzas rebeles (en su mayoría facciones islamistas radicales) que luchan contra Al Assad.

La ofensiva ha causado decenas de muertes y el destrozo de estructuras militares y civiles, como hospitales y escuelas, según denuncian ONGs presentes sobre el terreno. Según Ankara, el gobierno sirio está violando la tregua pactada por Rusia y Turquía para contener las hostilidades en esta zona.

En las últimas semanas, las tropas regulares sirias capturado varias ciudades claves y amenazaban con tomar Saraqib, una población en la que confluyen con la estratégica carretera la M-4, que une Alepo con la costa mediterránea, lo que cortaría la principal vía de comunicación entre las localidades en manos rebeldes.

En la noche del domingo el Ejército turco envió convoyes -compuestos de blindados, tanques y camiones cargados con maquinaria de construcción- para reforzar las posiciones en torno a Saraqib. Este lunes, helicópteros turcos evacuaron a sus muertos y heridos poco antes de la represalia.

«Se han identificado unos 40 objetivos, y según las primeras estimaciones se han neutralizado unos 30-35 sirios de la parte contraria. Pero no es un punto final, la operación continúa», sostuvo Erdogan en una comparecencia de prensa hoy en la mañana.

El presidente explicó además que sus generales están en contacto directo con Rusia, principal apoyo del gobierno sirio y cuyas fuerzas militares también participan en la ofensiva sobre Idleb. «Les hemos dicho que ellos no son nuestro objetivo sino que lo es el régimen y que no intenten interponerse entre nosotros. Porque hemos dado mártires y es imposible que permanezcamos callados. Vamos a hacer [al régimen sirio] pagar por ello», advirtió.