CLG salió a la calle y le preguntó a la sociedad rosarina sobre el asesinato perpetrado el pasado sábado por once jugadores de rugby
CLG salió a la calle y le preguntó a la sociedad rosarina sobre el asesinato perpetrado el pasado sábado por once jugadores de rugby
Fernando Báez Sosa fue asesinado el sábado pasado a la salida de un boliche de Villa Gesell por once jóvenes. Once jóvenes, de entre 18 y 20 años, de la localidad bonaerense de Zárate, once jóvenes hijos de familias adineradas, once jugadores de rugby. Un asesinato cruel, violento y cobarde.
Durante el verano, la escena se repite: un grupo de amigos, jugadores de rugby, se agarran a las piñas en Brasil, en Punta del Este o en Villa Gesell, y la polémica se desató. ¿El rugby es un deporte violento? ¿Es culpa del deporte que once jóvenes hayan pegado a otro hasta matarlo? ¿De quién es la culpa? ¿Hay algún culpable o somos todos?
CLG salió a la calle y le preguntó a la sociedad rosarina su opinión sobre este asesinato y el vínculo del deporte con la violencia.
«Es un episodio terrible, es terrible ver cómo sigue el abuso del machismo y el abuso, sobre todo, de los rugbiers, que están entrenados para ser así de violentos», manifestó una de las consultadas, y agregó: «Tienen que ser juzgados como corresponde, no tener en cuenta que ponen un poco de plata y no pasa nada. Entre muchos mataron a uno y hubo familias que cubrió a esos chicos».
Otro de los consultados señaló: «Se pone al deporte por encima de la cuestión de la violencia. Habría que separar las cosas, no todos los que hacen rugby son violentos. Con respecto a esto, me parece una locura y salvaje»
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