Fuertes lluvias, con tendencia a tormentas, se pronosticaron para los próximos días en los estados australianos de Victoria y Nueva Gales del Sur
Fuertes lluvias, con tendencia a tormentas, se pronosticaron para los próximos días en los estados australianos de Victoria y Nueva Gales del Sur
Se esperan fuertes lluvias en los próximos días en Australia. El este, la zona más castigada, tendrá precipitaciones que ayudarán a apaciguar los incendios que arrasan con los estados de Victoria y Nueva Gales del Sur. A pesar de la noticia positiva para los australianos y el sofocante calor sumado al clima seco, se teme que las fuertes lluvias traigan otros problemas.
Lluvia importantes, tormentas y fuertes vientos, eso es lo que prevén en Oceanía. Sin embargo, también se desaconsejan las actividades en la costa por el riesgo de oleaje y fuertes vientos.
Los bomberos de ambos estados hace meses que luchan contra el fuego se esperanzan con la llegada del agua y a través de su cuenta de Twitter lanzaron: «Si este pronóstico de lluvia llega a buen término, estos serán todos nuestros regalos de Navidad, cumpleaños, compromiso, aniversario, boda y graduación, todo en uno. Dedos cruzados«.
Sin embargo, a pesar de la alegría se teme el impacto que pueden tener las súbitas lluvias en los suelos cubiertos de ceniza. El país, ya de por sí muy seco, vive una de las peores sequías que se recuerdan y muchos habitantes tienen depósitos para recoger agua de lluvia.
Las autoridades advierten que los depósitos podrían verse contaminados por animales muertos, restos o por componentes químicos liberados por le calor.
La presencia de ceniza y otros restos no es peligrosa para la salud.
Se temen sobre todo los daños que puedan causar las lluvias y las tormentas en los suelos privados de vegetación por el fuego. Estos terrenos son más favorables a las inudaciones y los corrimientos de tierras.
Otra amenaza es que la abundante ceniza, que no puede ser retenida por la vegetación, termine en los ríos provocando muertes masivas de peces y plantas fluviales.
Las lluvias limpiarán un poco el aire irrespirable, que está obligando, por ejemplo, a jugar el Abierto de Australia de Ténis de Melbourne en condiciones extremas.
El humo de los incendios australianos dará la vuelta al mundo
Los satélites de la NASA han analizado el aerosol, el humo y las partículas emitidos por los incendios en el este de Australia y han concluido que dará al menos una vuelta al mundo hasta volver a la costa australiana entrando por el oeste.
Los satélites han analizado la formación de pyrocumulus, nubes creadas por los grandes incendios o por erupciones volcánicas y su circulación en la atmósfera.
El humo hace que la Tierra absorba más radiación solar. Los incendios emiten también grandes cantidades de carbono a la atmósfera, empeorando el cambio climático.
Se trata de un ejemplo de la llamada retroalimentación, en la que un fenómeno causado por el cambio climático tiene un impacto en el propio cambio climático.
Al menos 28 personas han muerto a causa de esta temporada de incendios excepcionalmente temprana e intensa. Se estima que han ardido cinco millones de hectáreas.