Está en todo el país, su veneno puede ser diez veces más potente que el de una cobra, y se la conoce como “araña del rincón” por su capacidad de esconderse en zócalos, grietas y rincones de difícil acceso
Está en todo el país, su veneno puede ser diez veces más potente que el de una cobra, y se la conoce como “araña del rincón” por su capacidad de esconderse en zócalos, grietas y rincones de difícil acceso
Aunque las picaduras de la “araña del rincón” son poco frecuentes, el ataque de esta clase de arácnido venenoso dejó en terapia intensiva a una nena de 3 años oriunda de Bahía Blanca.
El hecho ocurrió el domingo, cuando la menor festejaba su cumpleaños y su padres notaron que presentaba un hematoma en el ombligo producto de una picadura. La rápida reacción de los mismos, que la llevaron inmediatamente al hospital local, permitió que los médicos le suministraran el antídoto correspondiente y fuera derivada al Hospital Penna de la Ciudad de Buenos Aires.
Si bien su evolución es buena, continúa en observación en terapia intensiva por las graves lesiones que sufrió en la piel -a la altura del estómago- y por las afecciones que se le presentaron en el hígado y el riñón.
Christian Dokmetjian, Director del Instituto Nacional de Producción de Biológicos del Instituto Malbrán, le explicó a Infobae: «Fabricamos el antiveneno en Malbrán. Es uno de los más difíciles de obtener y se distribuye a todas las provincias ya que es un araña que se encuentra a los largo de todo el país, sobre todo en zonas rurales. No son tan comunes en las ciudades”.
La “araña del rincón”, que pertenece a la especie Loxosceles, es llamada de esa manera por su capacidad de esconderse en zócalos, grietas y rincones de difícil acceso y poca higiene. Son de color marrón claro, no miden más de 3 centímetros, se mueven velozmente y tienen la cola ligeramente alargada y peluda. Suelen aparecer en épocas de temperaturas elevadas y en lugares con poco luz. También es conocida como “araña violinista”, por la forma que toma la herida de su mordedura en la piel.
En un principio la picadura provoca un intenso dolor, muchas veces descripto como un pinchazo, y luego sensación de quemazón. En algunos casos aparecen signos como fiebre, escalofríos, náuseas, sudoración, dolor de cabeza, abdomen y agitación.
“A veces uno no reacciona ante una picadura y desiste de ir a atenderse a un hospital. Lo que hay que saber es que, en estos casos, el tiempo juego un rol importante porque el veneno actúa de manera más potente cuando son menores de edad por su tamaño y su peso. Hay pocos especialistas en el país que saben detectar que se trata de la picadura de esta araña”, precisó Dokmetjian.