Sánchez necesita de la abstención de los independentistas de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) para superar la votación de su investidura en el segundo intento, por mayoría simple.
Sánchez necesita de la abstención de los independentistas de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) para superar la votación de su investidura en el segundo intento, por mayoría simple.
Las negociaciones entre socialistas e independentistas para llegar a un acuerdo que permita la reelección de Pedro Sánchez «avanzan», según admitieron hoy ambas partes, aunque los plazos para que España tenga un nuevo gobierno podrían extenderse hasta el próximo año.
La reelegida presidenta del Congreso de los Diputados, la socialista Meritxell Batet, quien se reunió este miércoles con el rey Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela para comunicarle la lista de partidos que participarán de una eventual ronda de consultas sobre la formación de gobierno, reiteró que lo ideal sería que haya un nuevo gobierno «antes de Navidad«.
No obstante, Batet admitió que esta posibilidad «no es imposible» pero es «complicada» debido a que los tiempos «están ajustados», según declaraciones radiales.
Sánchez necesita de la abstención de los independentistas de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) para superar la votación de su investidura en el segundo intento, por mayoría simple.
Los independentistas exigen una «mesa de diálogo» entre el gobierno español y catalán sobre el conflicto secesionista, y dejan para más adelante sus reclamos más difíciles de asumir, como la amnistía a los líderes secesionistas presos o la posibilidad de celebrar un referéndum de autodeterminación.
Los equipos negociadores del Partido Socialista (PSOE) y de ERC se reunieron ayer en el Congreso de los Diputados por segunda vez y lograron acercar un poco más sus posiciones, en unas negociaciones que giran en torno al conflicto de secesión catalán.
Acordaron volver a reunirse el próximo martes, último plazo para llegar a un acuerdo si quieren que el gobierno de coalición pactado entre el PSOE y Unidas Podemos vea la luz ante de las fiestas navideñas.
«En este segundo encuentro se han reafirmado en que hay un conflicto político y que debemos resolverlo políticamente. Y en este sentido hemos avanzado en la reflexión para activar la vía política buscando los instrumentos necesarios para su encauzamiento«, dice el texto del comunicado publicado tras la reunión.
Por su parte, el ministro de Fomento español y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, amplió hoy que los avances en el diálogo tienen que ver con «aproximaciones» sobre cómo «intentar encarar un conflicto y no negarlo».
Los socialistas asumieron que deben encontrar una fórmula para que los independentistas expresen sus demandas de soberanía dentro de un marco legal.
“A veces lo obvio en este país constituye un escándalo. Desde la asunción de que tenemos un problema que afecta no solo a Cataluña, sino al conjunto de España, se trata de encontrar, como a todo conflicto, cauces de expresión de tal forma en que no sea necesario situarse fuera del ordenamiento jurídico”, explicó Ábalos.
«¿Cuál es el instrumento para ello? De eso estamos hablando», remarcó en declaraciones a la prensa tras un acto en su ministerio.
En tanto, del lado independentista los avances empiezan a generar tensión.
La vocera del partido anticapitalista e independentista CUP, Mireia Vehículo, afirmó que la mesa de diálogo entre PSOE y ERC «no soluciona nada» porque «no hay concreciones» sobre la autodeterminación, la amnistía y «el fin de la represión».
Según advirtió la diputada de la CUP, los republicanos están dando un «cheque en blanco» a los socialistas, y eso «desmovilizará a los independentistas».