El ex líder de la banda “Los Monos” asesinado en mayo de 2013 hubiese cumplido 36 años el 25 de noviembre. Los detalles de una celebración a lo grande
El ex líder de la banda narco “Los Monos” asesinado el 26 de mayo de 2013 hubiese cumplido 36 años el 25 de noviembre pasado. Los detalles de una celebración a lo grande
Dos grupos de cumbia, fuegos artificiales y la inauguración de un nuevo mural en su honor. Todo eso y más incluyó la celebración del cumpleaños post mortem de Claudio “Pájaro” Cantero, asesinado el 26 de mayo de 2013 en una emboscada que todavía permanece impune.
El 25 de noviembre pasado, el ex líder de la banda narco “Los Monos” hubiese cumplido 36 años y este sábado a la noche, unas doscientas personas lo recordaron con una fiesta de cumpleaños montada en la canchita de fútbol ubicada en Khantuta, entre los pasajes 514 y 516, un espacio que los vecinos aseguran mandó a construir “Pájaro” para que jugaran los chicos del barrio.
Allí fue que tuvo lugar el rito de presentación del nuevo mural, entre alcohol y excesos. “Cómo poder vivir sin él, el pilar de la familia. El hombre al que todos en casa respetan y quien era el ejemplo para todos por su fortaleza, su sencillez. Sensible al dolor ajeno, siempre ayudando a quien lo necesitaba sin esperar nada a cambio”, puede leerse junto al rostro sonriente de “Pájaro”, dibujado sobre el paredón con su típica cabellera larga, oscura y con rulos.
“Creo que si me dieran la oportunidad de volver el tiempo atrás sin pensarlo lo volvería a escoger”, cierra el escrito que no tiene firma, tampoco la del artista encargado de hacerlo. En la fiesta se repartieron incluso gorras con la inscripción: “Recordar es vivir. Pájaro”.
El mural se elaboró sobre uno que había sido pintado meses después de su muerte en esa canchita del barrio La Granada, el lugar donde “Los Monos” iniciaron su operatoria narco y construyeron su poder.
Cantero era señalado por los investigadores como el hombre que, a pesar de una educación formal precaria, logró organizar y expandir los negocios de la banda. Testigos de identidad reservada lo describían como “conciliador”. “Para ser violento tenía que suceder algo extremo”, aseguraron. “El Pájaro no hacía nada todo el día, era dependiente de la madre. Incluso se hizo la casa atrás de la casa de la madre. Era como un chico”, detallaron en la investigación que se inició en 2012 y que terminó con 25 condenas a miembros de la asociación ilícita.
En mayo de 2013, en los alrededores de un boliche de Villa Gobernador Gálvez, al sur del Gran Rosario, un grupo atacó a “Pájaro”. Una bala le rozó en la oreja y otra impactó en el brazo izquierdo. La tercera fue letal: ingresó por el hombro derecho y le perforó el corazón.
“Lo esperaron, lo siguieron, lo observaron. Acecharon a su presa aprovechando la oportunidad a traición. Y lo ultimaron cuando ya estaba caído en el suelo”, reconstruyó la fiscal Cristina Herrera.
Cantero había tomado hasta la madrugada vodka y champagne en Yamper, un boliche ubicado en la zona sur de Rosario. A las 5.30 estaba por ingresar en Infinity Night, otro local bailable, pero de la localidad vecina. Por ese crimen llevaron a juicio a Luis “Pollo” Bassi, que le disputaba territorio a “Los Monos”, y a los sicarios Milton Damario y Facundo Muñoz. Fueron absueltos por el beneficio de la duda y la muerte de Cantero quedó impune.
El homicidio desató una cadena de venganzas. En las 48 horas posteriores fueron asesinados el propietario del boliche de Villa Gobernador Gálvez –por ese crimen fue condenado como autor material Ariel “Guille” Cantero, hermano de Claudio– y otras tres personas que la banda creyó involucrada en la muerte de su líder.
Esos homicidios, cometidos con obscena crueldad, expuso a la banda hasta cumplir un cometido contrario al que perseguían: lejos de fortalecer a la organización terminó por poner en jaque su poder.
Parte del clan familiar recibió distintas condenas. Otros permanecen libres. Y el sábado a la noche, recordaron a su ex líder a lo grande.