Cerraron los comicios en la provincia de Buenos Aires y la actual gobernadora, María Eugenia Vidal, y el candidato del Frente de Todos, Axel Kicillof disputan la gobernación del distrito más poblado del país. En el oficialismo saben que revertir la amplia derrota en las PASO es muy difícil, en tanto que en el peronismo K aguardan tranquilos a que el triunfo en las primarias se repita o se amplíe.
En Buenos Aires no hay balotaje, el que saca más votos gana. Por lo tanto, la elección se termina hoy y se prevé que los primeros resultados se conozcan a partir de las 21. Esta mañana, cuando votó en la mesa 658 del colegio Parroquial Don Bosco de Morón, Vidal dejó un mensaje de aliento para sus votantes. “Es un día en el que podemos hacer oír nuestra voz. Así que yo espero que sea la elección con mayor concurrencia desde el año 83”, indicó.
“Siempre un día de votación es para celebrar. Los argentinos recordemos que una de las cosas que decidimos no volver atrás es en la democracia”, dijo Vidal antes de retirarse e al encuentro de su familia para almorzar. Luego aseguró que “la transparencia de la elección está garantizada” y que mantiene las esperanzas de poder revertir el resultado.
Axel Kickillof votó en Pilar y le pidió al gobierno que “cuide a la gente y su bolsillo”. Le solicitó a los argentinos que “voten a conciencia y con el corazón”, y advirtió: “Pase lo que pase tiene que haber continuidad del actual gobierno hasta el fin de su mandato”.
Eduardo «Bali» Bucca, el candidato de Consenso Federal, espacio que lidera Roberto Lavagna, pelea por el tercer puesto en la provincia. Sin posibilidades de acceder a la gobernación, busca posicionar de la mejor forma la alternativa a la grieta que representa el ex ministro de Economía y el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey.