Cientos de manifestantes volvieron a salir a las calles de Bagdad para pedir servicios básicos, oportunidades laborales y un cambio de gobierno, en medio de una nueva oleada de protestas en el país que fueron reprimidas por la policía y dejaron más de 60 muertos en las últimas horas.
Los manifestantes se concentraron este domingo de manera pacífica en la céntrica plaza Tahrir, en la capital iraquí, donde acusaron al gobierno de “ladrones” y aseveraron que “los hermanos sunnitas y chiítas jamás vamos a vender la patria”, consignó la agencia de noticias EFE.
Al cumplirse tres días del rebrote de las manifestaciones, el saldo de muertos llegó a 63 y se contabilizan más de 2.592 heridos, la mitad de ellos en Bagdad, según informó ayer la gubernamental Comisión de Derechos Humanos de Irak.
Las protestas comenzaron el viernes de la semana pasada en distintos puntos del país y son la continuación de las registradas a principios de octubre para exigir servicios básicos y más empleo, además de condenar la corrupción, y en las que murieron 157 personas, la mayoría a causa de la represión policial.
- Mirá también: Irak: murieron más de 60 personas en protestas
En tanto, estudiantes secundarios y universitarios declararon esta mañana una huelga espontánea a través de redes sociales y se manifestaron en las cercanías de las plazas Tayarán y Al Julani, para exigir un cambio de gobierno y el fin de la corrupción.
A lo largo de la mañana, el Gobierno iraquí desplegó a las fuerzas de seguridad para impedir disturbios mientras el número de estudiantes que se sumaban a las protestas aumentaba, aseguró una fuente anónima de la Policía de Bagdad a la agencia española.
Los cuerpos de seguridad lanzaron gas lacrimógeno para dispersar a los manifestantes cuando intentaron avanzar hasta el puente de Al Yumhuriya, que une la plaza Tahrir con la Zona Verde, en la que se ubican edificios gubernamentales y embajadas, agregó la fuente citada por EFE.
Al tiempo que aclaró que durante las protestas de hoy no se registraron heridos y que, en general, las manifestaciones fueron pacíficas, especialmente en la zona de Al Baia, en el suroeste de Bagdad, y otras ciudades en el oeste de la capital.