Miles de catalanes se congregaron hoy en el centro de Barcelona bajo el lema «Por la convivencia, por la democracia, por Cataluña: ¡Basta!», en rechazo a la violencia callejera y la escalada del conflicto secesionista desatado hace dos semanas por las condenas de cárcel que el Tribunal Supremo de España le dictó a los líderes del fallido intento secesionista de 2017
La manifestación, convocada por Sociedad Civil Catalana reunió a unas 80.000 personas, según datos de la Guardia Urbana de Barcelona, y 400.000, de acuerdo con los organizadores.
En paralelo, en algunos puntos de la ciudad como la estación de trenes de Sants y la plaza Sant Jaume, tienen lugar concentraciones de los Comité de Defensa de la República (CDR), cuyo simpatizantes volvieron a enfrentarse anoche con la policía, provocando disturbios al finalizar una multitudinaria manifestación pacífica -que reunió a 350.000 personas- a favor de la libertad de los secesionistas presos y la «autodeterminación» de la norteña región.
Los manifestantes «unionistas» ocuparon el céntrico Paseo de Gracia de la ciudad condal con banderas españolas y catalanas, al grito de «Viva España» y «¡No se quema Barcelona!», en referencia a los focos de violencia que irrumpieron en las movilizaciones independentistas.
La movilización «constitucionalista» a favor de la unidad de España tiene lugar cuando los partidos ya están haciendo extraoficialmente campaña de cara a las elecciones generales del 10 de noviembre, en las que el socialista Pedro Sánchez busca revalidar su cargo.
Sánchez, quien está haciendo un delicado equilibrio en la gestión de la crisis catalana, actuando con firmeza con los responsables de los disturbios pero sin avanzar en ninguna medida de intervención del gobierno, dijo hoy desde un acto en A Coruña, Galicia, que el problema de la democracia en Cataluña es que «no se respeta la voluntad de los catalanes».
También instó al presidente catalán, Quim Torra, a que hable con el restos de partidos catalanes «que quieren salir del bucle de la autodeterminación y la independencia».