La actriz Silvia Montanari quien falleció esta madrugada en Buenos Aires a los 76 años a causa de un tumor. Ostentó una intensa trayectoria en televisión, cine y teatro donde se lució como una intérprete dúctil y dueña de una personal sensualidad.
Montanari murió en el Sanatorio de la Providencia donde se encontraba internada hace tiempo y sus restos serán velados a partir de las 16 en la cochería sita en Av. Córdoba 5084, Ciudad de Buenos Aires.
Nacida en la localidad bonaerense de Quilmes el 14 de enero de 1943, Montanari debutó en televisión a los 18 años en el clásico de Narciso Ibáñez Menta “Obras maestros del terror”.
Desde entonces comenzó a ganar reconocimiento como llamativa figura femenina en la pantalla chica y durante esa década del 60 tomó parte en una docena de diferentes ciclos, entre ellos, “Donde está marcada la cruz”, “Mi querido sobrino”, “Mañana puede ser verdad”, “Disparate Sociedad Anónima” y “Las chicas”.
También por entonces tomó parte en ciclos televisivos de impronta teatral como “Alta comedia”, “Teatro Palmolive del aire” y “Esto es teatro”, tal vez como prólogo al que sería su paso a las tablas.
En salas teatrales integró los elencos de “Hollywood… allá voy!!!” y “Tengamos el sexo en paz” y tuvo una consagratoria labor en “Panorama desde el puente”, clásico de Arthur Miller donde hizo pareja con Alfredo Alcón bajo dirección de Carlos Gandolfo.
Durante los 70 y en las pantallas de los canales 13 y 9 participó en los programas “Mi amigo Andrés”, “¿Dónde estás papá?”, “Juntos hoy y aquí”, “Casada por poder” y “Vivir es maravilloso”, por citar apenas algunos.
Por entonces, además, vivió sus años de mayor presencia en cine con presencias en “La gran ruta”, de Fernando Ayala; “Proceso a la infamia”, de Alejandro Doria; y “El pibe cabeza”, de Leopoldo Torre Nilsson.
Ya en los 80 y a la par de su intensa tarea televisiva en espacios como “Hombres en pugna”, “La búsqueda”, “Cuando es culpable el amor”, “Entre el amor y el poder” y “Querido salvaje”, se sumó a la producción cinematográfica bizarra de Emilio Vieyra como protagonista de “Todo o nada” (1984).
También por entonces vivió un promocionado romance con Darío Grandinetti que levantó polvareda en la más pacata sociedad de entonces ya que Silvia tenía 40 años y el actor 24.
“A Susana (Giménez) le perdonaron que saliera con Ricardo (Darín) porque ella era una actriz de comedia… Pero a mí, que era una actriz dramática, me mataron”, recordó Montanari en septiembre del año pasado durante una visita al magazine “Implacables” (El Nueve), explicando lo breve y tormentoso de esa relación mediatizada.
Tal vez para apagar los comentarios generados por su vínculo con Grandinetti asumió roles maduros en las exitosas tiras “La Banda del Golden Rocket” “Son de Diez” (donde hizo de madre de Florencia Peña y Federico Olivera), “Alén, luz de luna” (asumiendo a la malvada Fanny capaz de haber querido asesinar a su hijo Pablo, asumido por el protagonista Gustavo Bermúdez) y “Gasoleros” (como Emilia, la dueña del bar donde se sucedían muchas situaciones).
Semejante recorrido televisivo comenzó a apagarse con el inicio del siglo a partir de apariciones en unitarios (“Mujeres asesinas”, en 2005) o tiras (“Ciega a citas”, 2009), junto a una presencia en el filme “El boquete”, de Mariano Mucci.
En cambio, comenzó dedicarse más al teatro a partir de protagonizar “Tengamos el sexo en paz” (en 2004 con Alicia Aller y Marta González); “Hollywood… allá voy!!!” (en 2007 con Germán Kraus); “El enterrador” (en 2008, de Gerardo Sofovich); «Mujeres de cenizas» (entre 2014 y 2016 junto a Luisa Albinoni, Zulma Faiad y Liliana Pecora) y “Los Corruptelli” (que hizo en el verano 2016-17 en Villa Carlos Paz bajo las órdenes de José María Muscari).
En su vida privada, Montanari tuvo dos hijos: Marilyn, fallecida hace dos años, y el actor y cantante Rodrigo Aragón quien se encuentra radicado en los Estados Unidos y viajó para acompañar los últimos días de su madre.