La Asamblea Nacional de Venezuela acordó, con los votos de la mayoría opositora, reconocer como refugiados a todos los migrantes de su nacionalidad, e instó a los países de la región a no imponer restricciones a su movilidad y a la comunidad internacional a dar una «respuesta global» al problema.
La AN, controlada por la oposición, dispuso «declarar a todos los desplazados venezolanos que han huido del país con el estatus de refugiado en toda la región, de acuerdo a lo contemplado en la Declaración de Cartagena».
Los diputados argumentaron que «son personas que han huido de su país porque su vida, seguridad o libertad han sido amenazadas por la violencia generalizada, la agresión extranjera, los conflictos internos, la violación masiva de los Derechos Humanos u otras circunstancias que hayan perturbado gravemente el orden público».
Además, volvieron a señalar al gobierno de Nicolás Maduro como «la causa del éxodo masivo de venezolanos».
Y añadieron que sólo cuando el líder chavista abandone el poder, se establezca un gobierno de transición y se celebren «unas elecciones verdaderamente libres y justas» será posible «la creación de las condiciones propicias para que haya un descenso de la migración forzosa y surjan incentivos dirigidos a los venezolanos para que retornen a su país».
La Asamblea Nacional también envió un mensaje a la comunidad internacional, citaron las agencias de noticias DPA y ANSA.
En primer lugar, pidió a los países de la región que «eviten la puesta en práctica de políticas dirigidas al aumento de restricciones migratorias y a evitar, en lo posible, prácticas xenofóbicas bajo la conciencia de que el venezolano no abandona su país voluntariamente».
Asimismo, instó «a toda la comunidad internacional a reconocer la crisis de refugiados venezolanos y, por consiguiente, otorgarle una dimensión global a la misma para su atención».
Más de cuatro millones de venezolanos salieron del país en los últimos años hacia otros estados de América Latina y el Caribe o Estados Unidos y Europa para huir de la crisis política, económica y humanitaria en Venezuela.
La ONU calcula que, si la tendencia continúa, a final de 2019 superarán ya los cinco millones.