La escritora Elvira Orphée (1922-2018), cultora de una incomparable obra construida a partir de una prosa poética deslumbrante, murió ayer a los 96 años, informaron allegados a la autora.
Uno de sus primeros libros «Aire tan Dulce» , recientemente reeditado en 2009 por el sello Bajo La Luna, es considerado «iniciático» y de culto por su conmovedora y excepcional urdimbre del lenguaje como Clarice Lispector o Alejandra Pizarnik que fue una de sus grandes amigas y admiradoras.
Nacida en Tucumán, Elvira Orphée había llegado a Buenos Aires en 1940 para estudiar letras, y luego de casarse con el pintor Miguel Ocampo, padre de sus tres hijas, a quien acompañó como diplomático rumbo a Roma, nació su amistad con Elsa Morante, Alberto Moravia e Italo Calvino entre otros reconocidos personajes de la literatura internacional.
Su primer novela «Dos Veranos», publicada en 1956, fue recibida con unánimes elogios. Posteriormente siguieron otros títulos en los que Orphée despliega su personal estilo sin conceder tregua a ninguna premisa ajena al misterio poético mágicamente revelado, según sus própias palabras: «Como la más profunda necesidad de expresión del ser humano».