La devaluación del peso frente al dólar impacta en los precios de las distintas carnes, aunque no en el mismo porcentaje. Según un informe elaborado por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva), en la comparación interanual la carne bovina aumentó un 43,6%.
En el caso de pollo y cerdo, las subas se ubicaron por encima de la carne. En los últimos 12 meses el precio del pollo aumentó un 53,1%, mientras que el del cerdo un 46,6%.
Estos incrementos provocan cambios en la forma de consumir de los argentinos, quienes sufren la inflación y la pérdida de poder adquisitivo. El ciudadano, típico consumidor de carne, se ve obligado a inclinarse más por el pollo o por cortes más baratos.
Por eso, CLG recorrió distintas carnicerías de Rosario y dialogó, tanto con carniceros como con clientes, sobre cómo ha cambiado la forma de consumir carnes. Dos entrevistados contaron que viajan desde Villa Gobernador Gálvez hasta Rosario para conseguir mejores precios. Mirá lo que dijeron en este nuevo #InformeCLG: