Ecologistas en Acción denunciaron la muerte de cuatro linces en «manos de cazadores» en España desde principio de año a la fecha. El hecho se produjo en los Montes de Toledo. Según confirmó la Junta de Castilla-La Mancha hubo otros cuatro que perdieron la vida atropellados. De los que murieron por la caza, dos recibieron disparos y otros dos por métodos ilegales de captura, uno en un cepo y otro en un lazo.
Desde la Junta se califica «especialmente trágico el disparo a bocajarro que provocó la muerte de una hembra reproductora que contaba con cuatro cachorros, los cuales presumiblemente no lograron sobrevivir dada la corta edad que tenían». Nenúfar había tenido las crías en abril y fue asesinada en junio. Los otros tres muertos eran machos.
El jefe del servicio de espacios naturales de la Consejería de Desarrollo Sostenible, Antonio Aranda, aseguró: «Las crías de Nenúfar eran muy pequeños para sobrevivir, hemos encontrado a uno muerto y a los otros no, pero los damos por perdidos». «Nunca había ocurrido algo así, pero no podemos criminalizar a todos los cazadores, son hechos puntuales», añadió.
Por otra parte, el portavoz de Ecologistas en Acción, Miguel Hernández, manifestó que «desde que se tienen estadísticas de mortalidad del lince en este siglo no se había producido una cifra tan alta de muertes debido a la caza ilegal de linces en una zona tan concreta y en tan poco espacio de tiempo». Además, resaltó que es preocupante que «no se hayan hecho públicos hasta ahora» los números.
La Junta de Castilla-La Mancha enfatizó que trabaja y realiza «un gran esfuerzo de investigación» para poder determinar qué fue lo que sucedió y dar con los responsables directos de estas muertes. Si bien no se han resuelto todos los casos, en dos cotos de caza iniciaron expedientes sancionadores para el cierre de la actividad cinegética por los años venideros.