La periodista Marisa Brel contó en más de una oportunidad que para tener a su segundo hijo, recurrió a la subrogación de vientre en Estados Unidos. Este semana, no se perdió el debut en la pantalla de Telefé de la novela «Pequeña Victoria», que trata esta temática como el eje principal. Victoria es una niña nacida por subrogación que tiene a cuatro figuras maternas, protegonizadas por las actrices Julieta Díaz, Inés Estévez, Natalie Pérez y Mariana Genesio Peña.
Luego de los primeros capítulos, la comunicadora expresó su punto de vista y fue crítica por algunas de las situaciones y las formas que se muestran en la ficción. «El mensaje que se le deja a la sociedad es importante. La vi ayer para ver cómo se manejaba el tema, y la verdad que me resulta fuerte, no creo que la siga viendo. Había muchas cosas de información que estaban mal», comenzó diciendo en diálogo con el programa Por si las Moscas.
Igualmente, aclaró: “Celebro que se toquen temas para que se naturalicen y desmitificar cuestiones, pero imaginate que si estoy desesperada por tener un hijo y voy a subrogar un vientre y veo en la novela que el contrato se puede deshacer, me da un miedo mortal”.
Además, se mostró totalmente en contra de la manera en la que se construye el personaje de la mamá subrogante. “A una mujer para ser mamá subrogante le hacen un montón de exámenes de cuerpo, de salud, psicológicos y psiquiátricos porque es muy fuerte gestar un hijo que no es tuyo». Y remarcó: «La madre no es una clienta, eso me hacía doler el estómago, es un tema muy sensible este”.
«Hay cosas que estuvieron mal porque no se pueden. Acá en la Argentina no hay una ley y mostraron cosas que no se pueden. No está prohibido pero tampoco está avalado. Gracias a Dios se están haciendo con arreglos judiciales y sólo se permite con hermana, prima o alguien que tenga un lazo», agregó.