Un hombre se ganó la lotería en Estados Unidos y se le ocurrió una idea desopilante: comprar el restaurante donde trabajo durante 17 años, ¡sólo para obligar a su antiguo jefe a usar un ridículo disfraz de pollo!
Se trata de Paul Watson, de 49 años, de Rochester, quien ganó nada más ni nada menos que la asombrosa cantidad de 149 millones de dólares de la «Lotería Estatal de Múltiples Millones de Minnesota”.
Si bien el afortunado se hizo del premio en marzo, recién ahora se pudo conocer una de las cosas que hizo con esa plata. Al ganar la suma millonaria, Watson fue consultado sobre qué es lo que haría con semejante suma de dinero, a lo que respondió: “Dejar mi trabajo apestoso y tal vez vengar a mi estúpido jefe”.
Fiel a su palabra, posteriormente compró el restaurante donde solía trabajar y aumento el sueldo a todos los empleados, excepto a uno, el gerente del restaurante Oscar Reyes. “Ese imbécil nos gritaba y nos trataba como esclavos, ¡Si fuera legal para mí azotarlo lo haría!», aseveró.
Paul Watson nombró a Reyes “Director de Relaciones Públicas” del comercio gastronómico, un trabajo que consiste en distribuir muestras de pollo frito en la calle vestido con “un disfraz de pollo”.
Por su parte, el ex jefe dijo: “Durante 19 años fui el gerente del restaurante. Yo era el jefe aquí, ahora ese imbécil ascendió, ¡pero tengo que disfrazarme de estúpido gallo! ¡Eso no es una promoción!».
El Director de Relaciones Públicas Oscar afirmó que su nuevo trabajo es extremadamente degradante y que Watson lo expone a un constante hostigamiento, por lo que presentó una demanda de $185.000 dólares contra el flamante millonario.
Por último, Watson aseguró en diálogo con periodistas estadounidense que no le importa la demanda, alegando que “desquitarme con ese hombre no tiene precio”, concluyó.