Si el triunfo de Omar Perotti significó una reconfiguración del mapa político provincial con la vuelta del peronismo al poder que los resultados en las elecciones nacionales a favor de Alberto Fernández terminaron de consolidar y dar inicio a una nueva era en Santa Fe.
Tal es así que el peronismo quiere aprovechar estos meses antes del 10 de diciembre, cuando se concrete el traspaso, para aprobar el mismo proyecto de Reforma Constitucional que elaboró Lifschitz para obtener su reelección y que terminó sucumbiendo en la Legislatura.
Luego de un intenso debate durante todo el año pasado en la Cámara de Diputados, el expediente quedó en la comisión de Educación y apenas se reactive la labor parlamentaria van a pedirle preferencia para su tratamiento, adelantó Carlos del Frade del Frente Social y Popular en diálogo con La Política Online.
«Junto con -Rubén- Giustiniani queremos que se siga discutiendo la Reforma y que no sea solamente una cuestión de interés electoral, queremos que se discuta todo» afirmó del Frade que junto con el ex socialista forman un interbloque de cuatro legisladores.
Por su parte, en el peronismo están analizando si además de impulsarlo en las comisiones se pide tratamiento sobre tablas o preferencia en el recinto, donde Miguel Lifschitz y Antonio Bonfatti dejarían expuestas sus diferencias.
A su vez, Omar Perotti fue un gobernador clave para el triunfo de Alberto en las Paso y lo será para la gestión, a pesar de que el mandatario de mayor confianza sea el tucumano Juan Manzur.
El rafaelino necesita contar con la reelección para que su poder no se diluya un año antes del fin de su mandato, como suele ocurrirles a los gobernadores santafesinos, que además es uno de los presidenciables.
La discusión se cruza con las negociaciones por la presidencia de la Cámara de Diputados que a priori le correspondería al actual gobernador Lifschitz
En caso de que la reforma logre aprobación en la cámara baja, Perotti deberá negociar fuerte con los senadores que lidera Armando «Pipi» Traferri que como suele ocurrir en política, los acuerdos con los aliados suelen ser más costosos que con los ajenos.
Asimismo, la discusión se cruza con las negociaciones por la presidencia de la Cámara de Diputados que a priori le correspondería al actual gobernador Lifschitz quien lidera el bloque mayoritario del Frente Progresista.
Sin embargo, el peronismo empezó a sondear otras opciones y potenciar fisuras entre radicales y socialistas. De hecho, uno de los nombres que empezó a circular como posible presidente es el actual ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro.
En el socialismo aseguran que se trata de una jugada del PJ pero en el peronismo se despegan: «No apoyaríamos a Pullaro con quien tenemos tantas diferencias por su gestión en el ministerio de Seguridad», indicó a ese portal el diputado electo del Frente Renovador, Oscar «Cachi» Martínez.
En el entorno de Pullaro condicionaron la posibilidad siempre y cuando el acuerdo incluya a Miguel Lifschitz: «No vamos a romper con el gobernador» aseguraron a LPO y destacaron que el funcionario tiene muy buen diálogo con todos los espacios políticos.
Por su parte, el presidente de la UCR Julián Galdeano, enrolado con Cambiemos, mantiene una intensa y variada agenda que se alterna entre cafés con el gobernador electo y cenas con correligionarios y Lifschitz. Otra de las figuras que podría asomar como autoridad de Cámara.
Fuente: Fabricio Navone para La Política Online