Los analistas del mercado elevaron sus pronósticos de inflación en 15 puntos porcentuales y esperan que se ubique en 55% para este año, indicó hoy el Banco Central.
La autoridad monetaria dio a conocer el Relevamiento de Expectativas de Mercado correspondiente a agosto, en el que señaló que los participantes del sondeo hicieron un ajuste de 15 puntos porcentuales al alza en su cálculo respecto del mes previo.
Tras la disparada del dólar, las consultoras precisaron que «para 2019, estiman la inflación nivel general en 55% y en 57,6% la del componente núcleo».
También analizaron que la inflación de agosto fue de 4,3%, al saltar 1,9 puntos porcentuales frente a la encuesta anterior.
Para este mes, la tasa de inflación esperada es más elevada al llegar al 5,8% mensual.
El estudio señaló que para 2020, la expectativa de inflación de los analistas se ubicó en 38%.
Además, subrayó que la proyección sobre el tipo de cambio nominal promedio para septiembre fue de $60, «con un sendero creciente hasta alcanzar un valor en diciembre de 2019 de $66,7».
Según el informe, los especialistas proyectaron un déficit fiscal primario para 2019 de $142,6 miles de millones, es decir «$41,1 miles de millones adicionales de déficit respecto del REM de julio».
Para 2020, esperan un déficit de $114,5 miles de millones para 2020, $247 miles de millones inferior al de la encuesta previa.
Con relación a la tasa de interés, las proyecciones para la tasa promedio de Leliq en pesos es de un 80%, 22 puntos porcentuales más que el REM anterior.
Destacó que habrá «un sendero descendente hasta alcanzar 73,2% en diciembre de 2019».
Respecto de la variación del Producto Interno Bruto (PIB) real para 2019 estimaron una caída de 2,5%, mientras prevén que en 2020 la actividad económica se contraiga 1,1%, «contrastando con la expansión de 2% que proyectaban en la encuesta previa».
Las consultoras redujeron la expectativa de crecimiento para 2021 hasta 1,9%, la cual antes era de una suba de 2,5%.
También bajaron las expectativas de variación trimestral sin estacionalidad del PIB para los últimos tres trimestres del año y para el segundo se estimó un retroceso de 0,2%.