José Tornambé, presidente de la Camara de Titulares de Taxis en Rosario (Catiltar), definió a la actividad como “catastrófica” en la actualidad
Por Gonzalo Santamaría
Todos los sectores de la economía se vieron afectados por la última devaluación. Tanto productores como consumidores vieron los precios crecer luego de las Paso. Un sector altamente golpeado y, desde hace varios años, es el que nuclea a los taxistas.
Ellos se ven condicionados por los aumentos de combustibles o insumos pero a su vez por la actividad de la gente que puede elegir subirse a este transporte público.
CLG dialogó con José Tornambé, presidente de la Camara de Titulares de Taxis en Rosario (Catiltar), que definió a la actividad como “catastrófica” en la actualidad y agregó: “Estamos comiendo nuestro capital, algunos a punto de desaparecer”.
En los últimos tres años los aumentos de la tarifa de la bajada de bandera se basan en estudios, que generalmente coinciden, entre el Municipio y la Universidad Nacional de Rosario y marcaron que desde marzo de 2017 hasta marzo de 2019 el precio tendría que haber aumentado un 205% pero los titulares sólo decidieron aumentar un 85%.
Sólo este año, según los estudios realizados en marzo, comentó Tornambé, el costo de un taxi tendría que haber aumentado un 95%, sin embargo el incremento apenas alcanzó el 30%.
Estos números reflejan los informes realizados a fines del primer trimestre sin tener en cuenta la última corrida cambiaria post elecciones primarias.
“Estamos desfasados con los insumos, combustibles y repuestos”, sentenció el presidente de la entidad de transporte a CLG. Además fue claro: “Los taxis se pueden reemplazar con colectivos, bicicletas, etc… somos una urgencia”.
El 12 de agosto Argentina volvió a ser acechada por la volatilidad del dólar y el porcentaje estimado en marzo quedó atrasado: “Me asusta pensar en la nueva medición. La pura verdad es que la inflación va en contra del asalariado y nosotros somos reacios a aumentar”.
En consecuencia, dijo: “Es sorpresivo esto, nos debemos a la gente pero cuando aumentan los repuestos, por ejemplo, no podemos hacer malabares”.
En junio la bajada de bandera se posicionó en $52, mientas que la ficha cada 100 metros llegó a los $2,40 (a la noche la primera alcanzó los 58 y la segunda los 2,60), precios aun vigentes.
A la hora de aumentar la tarifa, los taxistas debaten luego de presentado el informe ya que el incremento desmedido para el bolsillo del ciudadano repercute negativamente en su trabajo. “De alguna manera seguimos trabajando”, confesó Tornambé.
Otra de las variables que tienen que contemplar los taxistas es la renovación de los vehículos. “En diciembre los taxis 2009 se tienen que actualizar y hoy un auto cuesta 800.000 pesos”, disparó el presidente de Catiltar que además aseguró que desde la Federación Nacional intentaron conseguir la quita del IVA para aquellos que deban cambiar su auto a fin de año pero no tuvieron respuestas.
En Rosario, los taxistas tuvieron conversaciones con concejales para llegar a obtener “créditos blandos” por parte del Banco Municipal pero que estas chances se “cortaron”. “Cuando compras un auto devolvés tres”, manifestó Tornambé ante CLG.
Y añadió que la baja actividad los fines de semana es una variable negativa que padece el sector y concluyó: “Estamos muy afectados”.