Números que duelen. Un total de 155 femicidios se cometieron en Argentina durante la primera mitad de 2019. Dentro de esos datos, se desprende que trece de las víctimas tenían menos de 11 años, informó el Observatorio de Femicidios del Defensor del Pueblo de la Nación, que precisó que la mayor cantidad de casos se registró en la provincia de Buenos Aires.
Según el informe del Observatorio, «39 asesinatos se cometieron con armas de fuego y 38 por apuñalamiento«, mientras que «un alto porcentaje de las víctimas fue golpeada o estrangulada«.
La investigación relevó «la totalidad de asesinatos de mujeres niñas, adolescentes o adultas y personas trans perpetradas por hombres por razones asociadas con su género, caratuladas como femicidio o muerte dudosa bajo sospecha de femicidio, así como los casos de femicidios vinculados», precisaron en un comunicado.
La muestra refleja los resultados detectados por el Observatorio entre el 1 de enero y el 31 de julio de 2019, período en el que se registraron «155 víctimas de femicidio confirmadas, entre ellas 18 femicidios vinculados y seis de personas trans«.
La investigación mostró asimismo que 13 de las víctimas tenían menos de 11 años, 11 habían sido violadas y que la mayor cantidad de casos fueron cometidos por hombres adultos.
«Si bien el número de homicidios en nuestro país ha ido en declive, las cifras de femicidios continúan siendo muy elevadas, por lo que debemos poner mayor énfasis en las políticas implementadas», afirmó Juan José Böckel, subsecretario general a cargo del Defensor del Pueblo de la Nación.
En cuanto a las «víctimas colaterales», el informe indicó que «103 niños quedaron sin madre«, mientras que también se confirmó que «la mayoría de los crímenes se produjeron dentro de un vínculo de pareja o en el seno familiar».
En tanto, Buenos Aires fue la provincia donde se registraron más femicidios (62 en lo que va del año), seguida por Córdoba, con 14 casos; Santa Fe, con 10; Tucumán, con nueve, y Chaco, con ocho.
En esa línea, el Observatorio detalló que «el 73% de los asesinatos se ejecutaron en los domicilios de las víctimas o en un entorno familiar«, mientras que «sólo el 23,9% de las víctimas había denunciado previamente a su atacante».
Asimismo, el relevamiento señaló que durante el período analizado hubo «seis intentos de suicidio y 38 suicidios consumados por parte los femicidas».
Al respecto, la Defensoría del Pueblo de la Nación indicó que «redobló sus esfuerzos para que las herramientas legales que tiene a su alcance y los compromisos internacionales que asumió se conjuguen de manera compatible».
«Estamos elaborando propuestas de carácter preventivo, asistenciales y medidas reparadoras», aseguraron y describieron que una de esas iniciativas busca «que se cumpla en el país la ley 26.150 de Educación Sexual Integral (ESI)» y que «se difunda e implemente la ley 27.499, también llamada ley Micaela, para garantizar que las personas que se desempeñen en la función pública estén capacitadas en la temática de género».
En cuanto a las propuestas asistenciales, destacaron el trabajo que realizan para «garantizar el acceso a la Justicia por parte de las mujeres víctimas de violencia».
Por último, en el aspecto reparatorio, la Defensoría instó a que se cumpla en el país la ley Brisa, «agilizando los trámites que dependen de la Anses para el pronto cobro de la reparación económica a los hijos de víctimas de femicidio».