La semifinal de Mundial de Tango de Buenos Aires fue el escenario este fin de semana de un inesperado episodio de violencia de género. Un bailarín ruso, Kirill Parshakov, fue descalificado por pegarle a su compañera cuando terminó la ronda de baile. A pesar de esto, la mujer no quiso hacer la denuncia.
El hecho salió a la luz a través de una publicación en el muro de Facebook de El Movimiento Feminista de Tango. De acuerdo al comunicado, el participante atacó con golpes de puño a la bailarina delante de varias personas.
«El jurado al enterarse de la situación descalificó a la pareja por haber incumplido con el reglamento de buena conducta y respeto», explicaron desde el movimiento en la red social. El MTF destacó la actitud que tuvieron algunas compañeras del certamen al acercarse para contener a la mujer agredida y subrayó: «Como sociedad no podemos invisibilizar, nunca más, las situaciones de violencia de género».
En diálogo con Télam, Ana Zeliz, integrante de la agrupación, contó que se trata de un matrimonio ruso con dos hijos y que a la mujer se le ofreció hacer la denuncia, pero que ella decidió no presentarla. «Si ella no quiere hacer la denuncia no se puede avanzar más, pero sí podemos visibilizar que existe este tipo de violencia y que los festivales no lo admiten», remarcó.
Por su parte, Parshakov también usó las redes para hacer su descargo y sostuvo que tuvo un discusión con su pareja al bajar del escenario porque «las cosas no salieron» como querían. «Es una pena que los organizadores hayan malentendido nuestras emociones. Lamentamos mucho que esta situación nos haya llevado a la descalificación», manifestó.