Una nena tucumana de 8 años pasó por cosas que algunos adultos no podrían siquiera imaginarse. Desde que fue diagnosticada con cáncer, vivió 52 quimioterapias, estudios médicos, internaciones y cientos de consultas. Gracias a su fortaleza, al apoyo que recibió y al tratamiento médico, hoy puede decir felizmente que venció a la enfermedad.
Hace un mes, Delfina y su familia recibieron la mejor noticia que podrían haber recibido en mucho tiempo: la enfermedad había desaparecido. Los pronósticos eran muy negativos, la nena padecía Linfoma no Hodgkin de Burkitt, un tipo de cáncer que avanza muy rápido.
La mamá de la menor, Mayra, contó que tuvo que dejar de trabajar para poder acompañar a Delfina durante el largo tratamiento. La mujer destacó en diálogo con diario Clarín: “En el hospital nunca tuvimos un gasto y los medicamentos nos llegaron a través de la Fundación Flexer”.
En medio de la preocupación apareció el médico Juan José Chaín, quien fue el oncólogo de la nena. La familia lo define como: ‘su héroe’. Junto a un equipo multidisciplinario, trabajaron en el servicio de Hemato Oncología del hospital del Niño Jesús.
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«La primera vez que me internaron pensaba que me iban a tratar mal, yo no les contestaba nada, pero después me acostumbré a los doctores, a las inyecciones, ya no lloro cuando me sacan sangre», expresó Delfina.
El 19 de julio pasado, la nena recibió la esperada noticia: el cáncer ya no estaba activo. Su mamá publicó en redes una imagen de la niña con un cartel que dice: «Vencí el cáncer». La fotografía se hizo viral, fue compartida más de siete mil veces en Facebook y tuvo cerca de 1500 comentarios.
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Mayra agradeció con distintos mensajes a sus médicos, cirujanos, enfermeras y todo el equipo del Hospital de Niños. También se refirió a quienes rezaron por su hija. Sin embargo, el mensaje más especial fue para ella: «Mi hija, mi hermosa, dulce y valiente Delfi, ¡bombón! Ella se lleva todo el crédito. ¡Una fortaleza como nadie! Gracias, gracias y más gracias. No tengo más palabras, no sé ni qué decirles. ¡Muchas gracias a todos!».
Desde el feliz diagnóstico, Delfina comienza una nueva etapa de recuperación, que fue apoyada por el Ministerio de Salud Pública, que se puso a disposición para lo que necesitaran. La nena espera que el año que viene, si todo sigue evolucionando bien, pueda volver a clases con sus compañeritos.