Foto gentileza Redacción Rosario
Los restos de un joven enterrado como NN en el cementerio de la localidad santafesina de San Lorenzo fueron identificados como los del militante del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), Horacio Víctor O’Kelly, un cordobés de 19 años desaparecido en Rosario en 1975, informaron este martes fuentes judiciales.
El juez federal 4 de Rosario, Marcelo Bailaque, declaró que los restos exhumados en 2005 por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) en el cementerio de San Lorenzo son los de “quien en vida fuera Horacio Víctor O’Kelly”.
Según informó la Unidad Fiscal de Derechos Humanos de Rosario, O’Kelly, de 19 años, desapareció en Rosario en junio de 1975 -antes del golpe de Estado- presuntamente a manos de un operativo del Ejército.
El joven oriundo de Córdoba militaba en la guerrilla marxista del Ejército Revolucionario del Pueblo y residía en Rosario en esa fecha.
Según su legajo en la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep), “en esa circunstancia, en el mes de junio de 1975 la madre recibe una llamada telefónica en la que una voz femenina le comunica que su hijo fue muerto por una patrulla del ejército”, detalló la Fiscalía.
El fiscal Adolfo Villate, cargo de la Unidad de Derechos Humanos, explicó que en el mismo sitio donde fuera hallado O’Kelly “ya fueron encontrados e identificados los restos de Pablo Martín Sandoval Luque y Alberto Isidoro Losada”.
Se trata de militantes del ERP que participaron del copamiento del Batallón de Arsenales 121 de la localidad de Fray Luis Beltrán el 13 de abril de 1975.
“Según partes oficiales de la época, (los tres) habrían sido ejecutados el 16 de abril de 1975 en circunstancias que permiten presumir la intervención de personal del Ejército, siendo luego puestos sus cuerpos a disposición del Juez de Instrucción Militar, Alberto Salvador Casals”, detalló la Fiscalía.
El juez “inmediatamente, y sin ordenar la realización de autopsias, dispuso la inhumación en el cementerio de San Lorenzo como N.N”, agregó.
Si bien los restos de O’Kelly fueron hallados por el EAAF el 11 de marzo de 2005, las muestras hemáticas obtenidas en un principio de familiares de la víctima no resultaron suficientes para lograr una identificación positiva, pero sí un posible vínculo.
Por esa razón, fue necesario exhumar en el cementerio de la ciudad de Córdoba a su tío paterno, Raúl Jaime O’Kelly, para realizar una toma de muestra ósea y obtener su perfil genético aumentando así la certeza de su identidad.