La desconcentración de la marcha por el segundo aniversario de la muerte de Santiago Maldonado, que se había desarrollado de manera pacífica, culminó con un grupo reducido de manifestantes vandalizando el Cabildo con pintadas en contra del gobierno nacional y las fuerzas de seguridad.
Si bien Sergio Maldonado, hermano de Santiago, había reiterado el pedido de no violencia, cuando el acto central culminó, el histórico edificio fue llenado de consignas con aerosol. A la cara del joven se le sumaron diversos mensajes: «Basta de democracia», «Guerra al Estado y los partidos», «Contra toda la autoridad», entre otros, acompañados por el símbolo de la anarquía.
Las fuerzas de seguridad que estuvieron presentes en Plaza de Mayo le confirmaron a este medio que, durante la movilización y en el transcurso del acto, no se registró ningún incidente. «Se trasladaron con normalidad y la desconcentración también fue positiva. Fue un grupo de 20 o 30 personas que lo hicieron en pocos minutos», manifestaron.
A través de la convocatoria en las redes sociales, Maldonado le había solicitado a las diversas agrupaciones políticas y de Derechos Humanos que se movilizaran en paz, sin entrar en provocaciones ni mucho menos generarlas.